Féretro, preparación del cuerpo, tanatorio, traslado, entierro, lápida, sepultura, mantenimiento de la sepultura....El coste de esta larga lista de servicios funerarios hacen que sea muy caro morirse en España.
En concreto, 2.200 euros de media, según el análisis sobre el coste de las defunciones en España, elaborado por la Unión de Consumidores de España (UCE). Este desembolso incluye los servicios y gastos básicos: nicho, gastos administrativos y féretro. Pero el precio de un sepelio puede ser mucho más elevado ya que otros estudios cifran en 3.500 euros el coste medio de un entierro.
Una carga añadida al sufrimiento de los familiares del fallecido será tomar la decisión más difícil: elegir entre darle sepultura al ser querido o la incineración. Hasta hace no muchos años ni siquiera había alternativa al entierro tradicional en nuestro país. Hoy, la incineración es una práctica en auge, por ser la más barata. Así, el coste medio de una incineración es de 1.300 euros, menos de la mitad que lo que cuesta la la inhumación tradicional en tumba o nicho.
Esta diferencia de precio es debida principalmente al menor coste del ataúd, puesto que en la incineración se utilizan féretros de menor calidad, y también al ahorro de la tumba o nicho para guardar los restos (alquiler del espacio, colocación de lápida, conservación de la sepultura... ). Además, en el caso de la inhumación, las tasas municipales son más altas, y varían considerablemente de unas ciudades a otras.
Las tasas para dar sepultura a un ser querido en Madrid son las más caras de España, 690 euros a los que habría que sumar el resto de trámites. La segunda ciudad más cara sería Barcelona, con 433 euros y la tercera, Valladolid con 313 euros. En la parte baja de la lista se encuentra Toledo, que tiene el coste de inhumación más barato: 113 euros en el caso de las sepulturas, según los datos recogidos por Yatri.
Los primeros trámites que deberán realizar las personas cercanas al fallecido son los burocráticos que consisten en la obtención del inscripción del fallecimiento en el Registro Civil. Si por el contrario, los más allegados al difunto prefieren encargar esta tarea a los servicios funerarios, tendrán que desembolsar entre 200 y 300 euros. La elección del féretro puede alcanzar unas cifras desorbitadas si se deciden por los más caros, hasta 8.200 euros. Los más baratos están en el entorno de los 420 euros.