Playmobil se despide de su creador. El dueño de la empresa juguetera alemana, Horst Brandstätter, falleció el pasado miércoles 3 de junio, según ha informado este lunes la compañía.
A los 81 años, el padre de los famosos clicks falleció en su casa de Zirndorf en Bavaria. Su compañía era "su pasión y su vida", por eso Brandstätter acudía diariamente a la oficina.
El empresario entró en el negocio familiar en 1952, a los 19 años, y se formó como moldeador de sus diferentes productos. Sus dos tíos eran los que se hacían cargo de la empresa en ese momento. No pasó mucho tiempo hasta que se dio cuenta de que las máquinas y los métodos de trabajo estaban desactualizados.
Tenía sólo 21 años cuando se unió como accionista, además empezó a promover la innovación dentro de la compañía. La aversión de Brandstätter a la frase: "Nosotros siempre lo hacíamos así" también se remonta a esa época.
Durante la crisis del petróleo en la década de los 70, Brandstätter, le solicitó a su jefe de diseño Hans Beck desarrollar un sistema de juego totalmente nuevo, que se pudiera ampliar constantemente. Su requisito era lograr la mayor cantidad de valor de juego en una cantidad mínima de plástico.
El resultado fueron 3 figuras de 7,5 cm (un caballero, un obrero y un indio) a los que bautizaron como Playmobil en 1974. "Su éxito en ese momento nos salvó de la quiebra" admitió más tarde Brandstätter.
"La gente al ver una figura de Playmobil por primera vez se queda impresionada; parece tan simple. Los adultos no ven el valor de Playmobil inmediatamente. Su atractivo está en las historias que desencadena en las cabezas de los niños", aseguraba sorprendido de cómo les había fascinado su idea a los niños.
Gracias a los clicks la compañía de Brandstätter se convirtió en el mayor fabricante de juguetes de Alemania. Recientemente, en 2014, las ventas mundiales del Grupo Brandstätter ascendieron a 595 millones de euros.