Los desahucios ya no copan grandes titulares en los medios de comunicación, ya que este drama se ha reducido de forma muy sustancial en los últimos dos años. Así, según los últimos datos del Consejo General del Poder Judicial, el número de ejecuciones hipotecarias se situó en un total de 68.135 en 2015, un 15,6% menos que un año antes.
De hecho, se trata de la cifra más baja desde 2008 (58.686 casos), y si se toma como referencia el segundo semestre de 2015, las ejecuciones descienden a 30.520, "cifra incluso más baja que la del segundo semestre de 2008, cuando se ubicaron en 34.698", tal y como destaca el economista Juan Ramón Rallo.
Sin embargo, las estadísticas del CGPJ no recogen una imagen detallada acerca de este fenómeno, ya que no todas las ejecuciones hipotecarias acaban en desahucio (entrega judicial) ni todas afectan a la vivienda habitual. Así, por ejemplo, de las 80.749 ejecuciones hipotecarias iniciadas en 2014, sólo 36.519 afectaron a viviendas habituales, según el Banco de España; y, de ellas, sólo la mitad concluyó en la entrega judicial de la vivienda, puesto que la otra mitad acabó en entrega voluntaria previa negociación con el banco (normalmente, a través de una dación en pago). Es decir, del total de ejecuciones, apenas el 20% termina en desahucio propiamente dicho (unos 17.000 casos en 2014).
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), 30.334 ejecuciones hipotecarias afectaron a una vivienda habitual en 2015, un 13% menos que en 2014, de modo que, "a falta de conocer los datos definitivos, muy probablemente sólo unas 15.000 familias se vieron afectadas el año pasado por un lanzamiento judicial", aclara Rallo. "Estamos, por consiguiente, ante la menor cifra de ejecuciones hipotecarias y de desahucios de toda la crisis económica, incluso inferior en algunos trimestres a las experimentadas en 2008 […] Estamos regresando a los niveles de desahucios previos a la crisis".
Tomando como referencia estos datos, el número real de desahucios de primera vivienda a lo largo de la crisis rondaría los 100.000 casos y no los 600.000 que tan habitualmente citan partidos políticos o la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH).
Los desahucios, fruto de la burbuja
Otro dato relevante a tener en cuenta es que el periodo 2005-2008, durante los últimos coletazos de la burbuja inmobiliaria, concentra el 59% de las ejecuciones hipotecarias iniciadas en 2015. En concreto, el 20,6% de las ejecuciones sobre vivienda correspondió a hipotecas constituidas en el año 2007, el 15,9% a hipotecas constituidas en 2006 y el 11,3% a hipotecas de 2008.
