Menú
Emilio J. González

Esperando a 2003

El tradicional ‘rally’ de Navidad de la Bolsa ha terminado, a pesar de que todavía quedan varias sesiones antes de que finalice el año. Pero se puede dar ya por concluida la subida del mercado de valores, porque por mucho que puedan ganar las cotizaciones de aquí al 31 de diciembre, por muchas operaciones de maquillaje que se puedan realizar para arreglar las cuentas del ejercicio en la medida de lo posible, el volumen de negocio que registra estos días el mercado y la ausencia de una tendencia alcista indican claramente que 2002 va a concluir con un Ibex entre los 6.000 y los 6.400 puntos, el rango en el que se mueve en las últimas semanas.

Pensar, sin embargo, que la recuperación del mercado de valores ha tocado a su fin podría ser un error. Los analistas piensan que, en el primer trimestre del año, la bolsa retomará la senda alcista, siempre y cuando las tensiones con Irak no lo impidan. Y los datos que justifican esas opiniones ya están presentes ahí. Estos días, por ejemplo, hemos visto caídas en los principales índices mundiales, pero estos recortes se han producido con poco volumen de dinero, lo que significa que las bajadas son recogidas de beneficios, no un cambio de tendencia. En este sentido, en cuanto el Ibex 35 se ha acercado al soporte de los 6.000 puntos el dinero ha aparecido con fuerza. Además, la volatilidad del índice selectivo del mercado español y la de las acciones cotizadas se ha reducido, lo que sugiere la proximidad de un cambio que, dado que funcionan muy bien los soportes, sería para retomar la senda alcista. Al contemplar, además, la volatilidad de los futuros a marzo del Ibex se ve que esta es todavía menor y cuando se producen estas situaciones, la bolsa sube.

Por otra parte, el optimismo, aunque con cautela, va ganando terreno entre los grandes inversores. La última encuesta de gestores de fondos de Merryll Lynch, realizada a principios de diciembre, indica que el 67% de los mismos estima que el mercado se fortalecerá en los próximos meses y un porcentaje muy elevado de ellos considera, además, que la renta variable, o sea, las acciones, sigue infravalorada. Adicionalmente, los gestores de fondos estiman que, en 2003, los resultados empresariales van a mejorar, tirando al alza de las cotizaciones, gracias a la reducción de costes que han llevado a cabo las compañías, a lo que puede seguir, a partir de mediados del próximo ejercicio, una mejora de la demanda gracias a la reactivación del crecimiento económico.

Por consiguiente, el año que se avecina será de subidas en la bolsa, si el conflicto con Irak no lo impide. La magnitud de las ganancias dependerá de cada empresa y de la fortaleza de la reactivación económica. Pero, al menos, ya se pueden avanzar dos cosas: que el ‘rally’ de Navidad puede darse por concluido y que hay que empezar a tomar posiciones de cara a 2003.

En Libre Mercado

    0
    comentarios