Menú
EDITORIAL

Solbes desaparece y Caldera no se entera

Con tal de darse un respiro en una campaña que se pone cuesta arriba, no ha encontrado mejor modo en el Gobierno que sacar la economía a pasear

Lo peligroso de hacer equilibrios en el alambre es que al final uno se termina cayendo. Esto mismo es lo que le ha pasado al ministro de Economía tras jugarse el tipo en el feo asunto de la CNMV. Porque por mucho que se hable de Conthe y de la Oficina Económica de Moncloa, el principal responsable de los asuntos económicos era, es y seguirá siendo el ministro Solbes. Si ya es difícil creer que Solbes ha estado al margen de todo el enredo del informe contra Francisco González, más difícil aun es pensar que el ministro no tiene nada que decir al respecto. Como esto es así, y en plena campaña electoral lo mejor es evitar remover la porquería, Solbes ha preferido quedarse en casa el día que el Gobierno ha decidido hacer públicas, por anticipado, las cifras de crecimiento del PIB.

El problema es que el testigo se lo ha pasado a Jesús Caldera, ministro de Trabajo y probablemente la cabeza peor amueblada del gabinete, marca ésta, visto lo visto, difícil de batir. Caldera se ha limitado a leer un papel y punto. No da más de sí. Y no lo ha hecho porque sus limitaciones en esta materia son más que evidentes y porque las cifras no son aún definitivas. Con tal de darse un respiro en una campaña que se pone cuesta arriba, no ha encontrado mejor modo en el Gobierno que sacar la economía a pasear. Se ve que no han entendido absolutamente nada. El descontento de un número cada vez mayor de españoles no proviene de la situación económica, sino de otros asuntos, relacionados con el Estado de Derecho y que tocan más de cerca la dignidad de todos. Que entendiesen algo tan elemental sería mucho pedir; que Caldera se dé cuenta de ello, tarea imposible.

En Libre Mercado

    0
    comentarios