LD (EFE) La elección de Telefónica, explica Industria, se debe a su oferta tarifaria, que supone una reducción de los precios actuales en torno al 33 por ciento, así como a las mejoras en la calidad del servicio y la atención al cliente; las medidas especiales para usuarios con discapacidad y las mayores garantías de continuidad del servicio.
Junto a Telefónica, que presta actualmente el servicio, se había presentado dos operadoras más: Yell (11888) y 11811 (Telegate).
El coste del 11818, antiguo 1003, cuando se liberalizó el servicio era de 35 céntimos la llamada más IVA, pero en julio de 2005 se liberalizó el precio y Telefónica lo subió hasta los 55 céntimos y posteriormente hasta los actuales 59,6 céntimos.
En este servicio sólo se facilitan números y no servicios de valor añadido como conexión con el número solicitado o información sobre carreteras o restaurantes, como sucede con los que compiten en el libre mercado.
Según Industria, la adjudicación de este servicio universal supone "importantes mejoras" para los usuarios y para el sector de las telecomunicaciones, al desaparecer el coste neto de la prestación, favoreciendo la competencia.
Industria tiene previsto realizar nuevas consultas públicas en 2009 para sacar a concurso otros elementos del servicio universal como el acceso a la red y prestación del servicio telefónico fijo, abono social, teléfonos públicos de pago situados en vía pública y guías telefónicas.
Junto a Telefónica, que presta actualmente el servicio, se había presentado dos operadoras más: Yell (11888) y 11811 (Telegate).
El coste del 11818, antiguo 1003, cuando se liberalizó el servicio era de 35 céntimos la llamada más IVA, pero en julio de 2005 se liberalizó el precio y Telefónica lo subió hasta los 55 céntimos y posteriormente hasta los actuales 59,6 céntimos.
En este servicio sólo se facilitan números y no servicios de valor añadido como conexión con el número solicitado o información sobre carreteras o restaurantes, como sucede con los que compiten en el libre mercado.
Según Industria, la adjudicación de este servicio universal supone "importantes mejoras" para los usuarios y para el sector de las telecomunicaciones, al desaparecer el coste neto de la prestación, favoreciendo la competencia.
Industria tiene previsto realizar nuevas consultas públicas en 2009 para sacar a concurso otros elementos del servicio universal como el acceso a la red y prestación del servicio telefónico fijo, abono social, teléfonos públicos de pago situados en vía pública y guías telefónicas.