Ese impuesto para los ricos no va a incrementar apenas la recaudación tributaria ni, por tanto, va a servir para reducir el déficit. Por el contrario, puede constituir un incentivo más para que todo aquel que pueda saque el dinero de nuestro país.
Emilio J. González
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Hartado dijo el día 21 de Mayo de 2010 a las 09:01:
Pocos economistas estudian dos efectos colaterales de la riqueza. Los efectos venganza y los efectos alegria. Por el efecto alegria, el que hace dinero comparte su riqueza: hace obra de caridad, o levanta un Teatro Liceo. Por el efecto venganza puede hacer cualquier cosa (En el limite "La visita de la vieja dama" del Durrenmart). Los celos, las envidas del español medio potenciadas por ZO pueden crear un efecto venganza tremendo... Mas importante y mortal que la fuga de capitales, puede ser la fuga de emprendedores... Con la fuga del dinero, se va el cerebro que lo supo hacer, crear, ganar.
Pocos economistas estudian dos efectos colaterales de la riqueza. Los efectos venganza y los efectos alegria. Por el efecto alegria, el que hace dinero comparte su riqueza: hace obra de caridad, o levanta un Teatro Liceo. Por el efecto venganza puede hacer cualquier cosa (En el limite "La visita de la vieja dama" del Durrenmart). Los celos, las envidas del español medio potenciadas por ZO pueden crear un efecto venganza tremendo... Mas importante y mortal que la fuga de capitales, puede ser la fuga de emprendedores... Con la fuga del dinero, se va el cerebro que lo supo hacer, crear, ganar.