Hoy, sí, ése es el sobrenombre más adecuado para nuestro riesgo-país, según mi criterio. Mañana, es fácil que tengamos el mismo collar con distinto perro. Rajoy fue una excelente elección de Aznar para regir el país, en el escenario económico-social previsible en 2003. Para el previsible, ahora, en el del 2012, probablemente no, y ,seguramente, aún menos si tiene que chalanear con ciertos partidos el progrqama legislativo y las acciones ejecutivas. Conste que siento un profundo respeto hacia la persona de Rajoy, al que atribuyo inteligencia y honestidad inusuales en en político.
Todo es cierto, y si me lo permiten, añadiría que todo el sistema institucional es otro lastre. Y para qué hablar de Mariano Rajoy.
No disponemos de alternativas en las que creer.
Yo ya sólo creo en la sociedad civil, dentro de unos años...