No es algo que pase todos los días, pero sí que hay determinadas épocas del año en las que las nubes descargan litros y litros de agua sobre una o varias regiones concretas. Las consecuencias de estas lluvias torrenciales pueden ser devastadoras. Uno de los fenómenos frecuentes durante los meses de septiembre y octubre en las zonas costeras del mar Mediterráneo es el conocido como gota fría. Toda precaución es poca, por eso, ayuntamientos como el de la localidad murciana de Cartagena ya empezaron a limpiar las ramblas del municipio debido a las previsiones de gota fría.
El impacto económico que tienen determinados fenómenos atmosféricos relacionados con el agua sobre la región afectada y sus habitantes es elevado. Es más, los riesgos que más daños producen en España son las inundaciones.
Entre los principales afectados tras una tormenta de gran calibre se encuentran los propietarios de vehículos. Y es que encontrarse el coche arrastrado por el agua, engullido por el barro o con el interior completamente inundado suele ser la escena con la que se encuentra más de uno cuando llega la calma.
¿Cubre el seguro de coche una inundación?
Entre enero y junio de 2015 han tenido lugar en España, según el Consorcio de Compensación de Seguros, 5 episodios de inundación relevantes que han afectado a varias regiones españolas.
En estas situaciones, el seguro de coche no cubre los daños materiales y personales resultantes ya que las inundaciones extraordinarias son un riesgo de los catalogados como extraordinarios. Esto no significa que los dueños de los coches siniestrados no tengan derecho a una indemnización o a la reparación de los desperfectos sino que será otra entidad la que responda.
Es aquí cuando entra en escena el Consorcio de Compensación de Seguros (CCS). Y es que, esta entidad empresarial pública tiene previsto indemnizar por los daños causados por las inundaciones ocurridas durante los 6 primeros meses del año con más de 105 millones de euros.
El Consorcio, ¿indemniza siempre?
El Consorcio de Compensación de Seguros actúa como un fondo de garantía frente a las catástrofes naturales que no cubre un seguro de coche convencional. Ahora bien, para que se haga cargo de los daños derivados de siniestros del tipo de una inundación es obligatorio que exista una póliza que cubra los mismos bienes, y al menos por las mismas sumas aseguradas.
Es decir, la póliza deberá ser un seguro a todo riesgo o incluir alguna garantía que cubra daños propios del vehículo como rotura de lunas o robo. De este modo, el Consorcio de Compensación no indemnizará a aquellos afectados que tengan contratado únicamente el seguro de Responsabilidad Civil Obligatoria ya que sólo cubre los daños a terceros. Fernando Summers, director de producto del comparador de seguros Rastreator.com, advierte de los seguros a terceros que sólo cubren la RC obligatoria. Según Summers, "son pólizas muy incompletas, que se limitan a cumplir con el requisito mínimo legalmente obligatorio, pero que no protegen al conductor ni le ofrecen servicios básicos como la asistencia en carretera". También será imprescindible que el usuario se encuentre al corriente de pago y que haya satisfecho la primera prima ya que el CCS no cubrirá a los que no cumplan esos requisitos.
¿Cómo actuar ante esa situación?
Tras sufrir un siniestro de estas características los afectados deben documentar el alcance de la gravedad de los daños sufridos por su vehículo. Fotografiar cada uno de los destrozos así como realizar un inventario de todo lo que se haya visto afectado. Después, tal y como informó recientemente Dionisio Babiano, director de Siniestros de AXA España, hay que "agilizar la notificación para la reparación de los posibles daños ocasionados ya sea por la compañía o por el Consorcio de Compensación de Seguros".
Vías para solicitar la indemnización
Existen 3 vías para solicitar al Consorcio de Compensación de Seguros la indemnización correspondiente: telefónica (902 222 665 ó 952 367 042) online (a través de la Oficina Virtual) o por escrito (dirigido a la Delegación Regional del Consorcio correspondiente rellenando la Hoja de Comunicación de Daños)
Documentación necesaria
Para poder iniciar los trámites se deberán aportar el número de póliza contratada y el nombre de la aseguradora así como los datos personales de la persona que presenta la solicitud y del asegurado. También será necesaria la información referente a la marca, el modelo y el número de matrícula del vehículo dañado. Para que el afectado pueda recibir el importe indemnizatorio que le corresponde deberá facilitar también el Código Internacional de la Cuenta Bancaria IBAN.
No reparar el vehículo
En el caso de que estuviera en un taller para ser reparado es recomendable notificar el nombre de éste así como su dirección y el teléfono para agilizar la peritación de los daños y la tramitación del expediente. Es muy importante conservar los restos del vehículo dañado o sacar fotografías antes de que sean retirados así como las facturas en el caso de que sea necesario hacer una reparación urgente.