Los funcionarios no dan crédito al último asalto de Pedro Sánchez: el INE, la casa de la que salen las estadísticas que certifican ante la opinión pública la buena, mediana o mala marcha de la economía. Y, como en este caso, el INE ha confirmado una grave crisis, esa institución acaba de recibir el ataque frontal del Gobierno, que ya ha forzado la salida de su presidente. El gran sindicato de los funcionarios, CSIF, avisa de que no consentirá la intromisión.
Un documento de CSIF señala lo siguiente: "Tras las últimas actuaciones que han llevado finalmente a la dimisión del presidente del INE, los representantes de los distintos Grupos de Trabajo del Instituto Nacional de Estadística y de las Mesas dependientes del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital por CSIF, creemos coherente respaldar como trabajadores del INE que somos, la imparcialidad, la transparencia en la recogida de datos y, por encima de todo, la absoluta independencia de nuestro organismo frente a cualquier Gobierno".
"Hemos asistido a cambios de presidentes coincidentes con cambios de Gobierno, pero en estas mismas situaciones, nunca se ha discutido la profesionalidad de nuestro organismo, el INE, por lo que, ante la actualmente creada y con las noticias que la han rodeado en los distintos medios de comunicación, nos negamos bajo ningún concepto a asistir atónitos y mudos ante lo que pudiesen ser dudas sobre nuestro trabajo, por resultado del mismo más o menos favorecedor a quien le interese", añade el documento de CSIF.
Los funcionarios no rechazan que "se pueda estudiar la metodología de nuestro organismo, que haya distintos modos de enfocarla". "Es harto lógico. Pero discutir las cifras presentadas por el INE es dudar del trabajo de los que lo formamos, y eso es lo que no se debate, ni contempla desde CSIF admitir duda alguna", señalan desde el sindicato.
"En el INE, todas las encuestas que recogemos los que directamente tratamos con empresas, autónomos, titulares... tanto como el resto de personal que trabaja sobre ella, recaba resultados, los transmite y evalúa, lo hace ante EUROSTAT, y por ello se integra en el resto de datos europeos", alertan. "Y ese trabajo, lo vamos a recalcar hasta el final, se hace de forma muy, pero que muy, profesional haciendo que el INE tuviese una imagen y una credibilidad acorde a este buen trabajo. Desde las distintas Subdirecciones Generales hasta el último encuestador, es un trabajo profesional y transparente", añaden.
"Los funcionarios y laborales del INE que formamos parte del equipo que asiste a las distintas Mesas y Grupos de Trabajo por CSIF hemos cuestionado, desarrollado, colaborado y firmado distintos acuerdos con nuestro organismo, hemos estado delante y hemos sido testigos de los avances en el mismo", pero también, añaden, "hemos visto la evolución de las distintas encuestas en las que trabajamos, hemos sido parte activa de este progreso y somos los que damos la cara por el mismo, pero no estamos dispuestos a aceptar que se manche el buen nombre del INE porque eso sería aceptar cualquier duda sobre nuestro trabajo diario", aclaran desde CSIF.
"Se nos ha expuesto ante la sociedad por unos datos recabados de forma profesional pero cuestionados en los distintos medios, quizá haciendo parecer que de algún modo no reflejan la realidad de lo solicitado", explican. "Nuestro trabajo no se hace a medida para obtener un dato que interese a una parte, sino al reflejo de una realidad según unos datos obtenidos por métodos tasados y publicados con total transparencia", concluyen.
Desde CSIF confirman que no van a permitir este nuevo ataque. Hay que recordar que este sindicato ya ha iniciado una serie de movilizaciones por la falta de respeto del Gobierno a la función pública y la propia Administración. El nuevo ataque de Sánchez al INE pone aún más en evidencia la realidad de esta situación.