La realidad es incompatible con el Gobierno. Donde el Ejecutivo ve un mercado laboral vigoroso fruto de una economía fuerte, los datos hablan de cientos de miles de parados ocultos y precariedad disfrazada de contratos fijos.
No es oro todo lo que reluce en las cifras de afiliación y paro registrado que hemos conocido este martes debido a que esconden un importante maquillaje estadístico que adultera considerablemente los números. Tanto es así, que si sumamos la última cocina de Yolanda Díaz a las cifras de paro "oficial" (que son los demandantes de empleo con relación laboral) tendríamos como resultado un "paro efectivo" de más de 3,4 millones de personas.
Además, de los 615.674 contratos indefinidos que celebra Yolanda Díaz, 180.909 contratos son fijos-discontinuos, que cuando no hay actividad no trabajan. Además, 150.557 son contratos indefinidos a tiempo parcial. Es decir, más del 50% de esos indefinidos de los que presume el Gobierno son indefinidos precarios.