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Los "comportamientos" que Sumar quiere castigar a base de impuestos

Los objetivos verdes del partido de Yolanda Díaz conllevarán nuevas tasas para castigar "comportamientos" inadecuados.

Los objetivos verdes del partido de Yolanda Díaz conllevarán nuevas tasas para castigar "comportamientos" inadecuados.
La candidata de Sumar a la presidencia del Gobierno, Yolanda Díaz, en un acto en Valladolid. | EFE

Sumar ha presentado este jueves su programa tras su proceso de "escucha" y los borradores que elaboraron sus expertos con propuestas de todo tipo. En el acto, con los principales responsables de la formación pero sin Yolanda Díaz, han señalado que entre los objetivos de la formación está convertir a España "en una de las grandes potencias verdes de Europa" encaminándola hacia "un modelo de transición socioecológica justa". Un objetivo que conllevará una batería de impuestos verdes para que "los más pobres y vulnerables", dicen, no paguen "los esfuerzos asociados a la transición energética y ecológica". Estos son algunos de los más relevantes:

Nuevo impuestazo energético: Sumar propone un "gravamen a los beneficios extraordinarios de la industria fósil", a la que tachan de "responsable directa del cambio climático".

Pagar por los "vuelos frecuentes": el partido de Yolanda Díaz se propone gravar los "bienes y servicios de lujo" que considera que "generan un gran volumen de emisiones y nulo rendimiento social". Entre ellos cita los "vehículos de lujo, aviones privados, grandes yates y vuelos frecuentes peninsulares o en clase business". Sobre los vuelos, habla específicamente de "limitar el uso de los jets privados" y de la aplicación de "una tasa creciente sobre los viajes frecuentes en avión que entraría en vigor a partir del segundo vuelo anual". En cuanto a las compañías aéreas, señala que implementarán "una tasa al combustible de la aviación".

Comportamientos "penalizados": Sumar quiere aprobar también una fiscalidad verde que "desincentive" comportamientos "de consumo que hemos de sustituir o moderar". A falta de más detalles, pone como ejemplo "bienes y servicios vinculados a los combustibles fósiles, la aviación de corta y media distancia en la Península, la ganadería intensiva o los productos de un solo uso".

Contra el plástico, otra vez: aunque ya está penalizado el plástico no reutilizable, Sumar propone una "tasa al plástico" para desincentivar "el uso de envases de plástico en toda la cadena de valor". "La recaudación obtenida se dedicará a objetivos estratégicos y prioritarios de la economía circular", apunta el partido, que se propone que la normativa se apruebe también en toda Europa.

Impuesto "general" a las "grandes empresas contaminantes": el partido de Yolanda Díaz aprobará, si gobierna, un impuesto "basado en las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) y azufre (Sox)" que será cedido a las comunidades autónomas. Apuntan que con esta tasa quieren "incentivar a las empresas más grandes y contaminantes a realizar las inversiones necesarias para reducir las emisiones de estos compuestos altamente contaminantes y dañinos para la salud".

Fiscalidad "saludable"

Otros comportamientos susceptibles de ser penados fiscalmente están relacionados con la salud: Sumar plantea un "plan de fiscalidad saludable" que tendrá como medida estrella un impuesto a las bebidas azucaradas y los "alimentos ultraprocesados no saludables". También revisarán los actuales impuestos al tabaco y el alcohol.

El programa también quiere acabar con el exceso de residuos: entre las propuestas, está que en 2028 se genere un máximo de 100 kilos de basura por persona y año "cuyo único destino puede ser la eliminación". En esta línea, propone prohibir "en un plazo razonable" la "fabricación y venta de productos cotidianos de alto impacto contaminante". Como ejemplo pone las toallitas y los bastoncillos de orejas.

Por último, cabe señalar en el capítulo de prohibiciones el coto que se quiere poner a la calefacción con gas en línea con los objetivos de la UE. Sumar pone en su punto de mira los "sistemas de calefacción dependientes de combustibles fósiles" y plantea "la obligatoriedad de sustituir las calderas con más de 15 años".

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