Bildu está utilizando Navarra como rampa de lanzamiento de su programa comunista. Ya ha conseguido hacer que el PSOE-PSN tenga que aceptar su agenda fiscal a nivel autonómico. Y ahora empieza a aplicar sus medidas locales en los municipios donde tiene mando directo o alianzas estables de gobernabilidad. Uno de ellos es Beriain (Navarra). Y allí los vecinos acaban de descubrir que el hecho de tener chalé puede disgustarle a Bildu. El pleno del Ayuntamiento de esta localidad acaba de aprobar con los votos de Bildu, Geroa Bai y Contigo Navarra una reforma de la ordenanza de vados que implica tener que pagar un nuevo impuesto para poder meter el coche en el garaje de sus casas.
Beriain está gobernado por la plataforma Adelante Beriáin/Beriain Aurrera (AB/BA), formada en 2015 por vecinos de la localidad simpatizantes o integrados en Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin. Es decir, una plataforma integrada por comunistas, separatistas y proetarras.
Y el programa fiscal de esta plataforma acaba de felicitar la Navidades a sus vecinos con un impuesto adicional por el uso de los vados de los garajes. ¿Y a quién afecta más? Pues obviamente a los dueños de chalés, que van a tener que pagarlo soportando el abono con las finanzas familiares.
Una organización vecinal se ha opuesto ya a la medida y ha presentado un escrito ante el Ayuntamiento de Beriain firmado, por el momento, por 305 vecinos.
Pero resultará difícil que Bildu y sus aliados hagan caso de las reclamaciones. Porque los proetarras tienen claro que quieren marcar la agenda de forma aún más exagerada que en la primera legislatura de Pedro Sánchez. Y que, al margen de la exigencia de la amnistía, referéndum, excarcelaciones de etarras, dinero para los territorios separatistas, presencia directa en la UE, comisiones parlamentarias contra los jueces, leyes de memoria, quieren determinar todo tipo de políticas. Incluida la fiscal. Y sus postulados son netamente comunistas.
La pasada legislatura Bildu ya dejó constancia de ello con su participación directa en la negociación de la reforma laboral. Y ahora ha marcado ya su objetivo con la negociación de la ley foral de medidas fiscales de Navarra: Bildu también marca ahora la política fiscal del PSOE y ha exigido un nuevo golpe en IRPF y Sociedades a las "rentas altas".
El parlamentario de EH Bildu, Adolfo Araiz presentó antes de acabar 2023 sus bases del acuerdo cerrado con el Gobierno socialista de Navarra para sacar adelante la ley foral de medidas fiscales para 2024. Y lo hizo con severas condiciones que han sido admitidas por la líder del partido de Pedro Sánchez en la Comunidad Foral, la presidenta regional María Chivite.
Bildu, así, permite la aprobación de la ley con su abstención y, a cambio, logra avanzar a lo largo de la legislatura en asuntos como la escala especial del ahorro o la tributación mínima en el caso del Impuesto de Sociedades.
De cara a 2024, además, los proetarras y los socialistas han pactado restringir la deflactación general del IRPF y dar paso a un esquema en el que, para las rentas inferiores a 30.000 euros, se incrementa el impacto de esa medida con un aumento del 50% de la deducción especial por rentas bajas. También se ha pactado reducir los incentivos al personal cuidador, que baja de una exención plena del 100% a un 75%. Igualmente las rentas inferiores a 30.000 euros dispondrá de una mayor deducción por alquiler —pasa de 1.200 a 1.500 euros y en el caso de los jóvenes puede llegar hasta los 1.600 euros—.
Por otro lado, se prorrogan un año más las modificaciones en la tarifa del Impuesto de Patrimonio y en las limitaciones sobre las bases liquidables negativas en el Impuesto de Sociedades, de forma que se reducen de nuevo algunos de los incentivos en ambos impuestos.
Y es que, todo ello, es ya la agenda de Bildu. Que el PSOE asume sin ningún desagrado.