Banco Sabadell contraataca. Después de que BBVA lanzara ayer jueves una OPA hostil por el 100% del banco que preside Josep Oliu, la entidad afectada ha enviado una comunicación a la CNMV asegurando que la entidad que lideran Carlos Torres y Onur Genç vulnera la ley de OPAS por haber desvelado información no incorporada al anuncio.
Además, el pasado miércoles, el veterano banquero grababa un vídeo dirigido a trabajadores y accionistas en el que explicaba los motivos del rechazo del Consejo de Administración a la oferta de fusión de BBVA. "Infravalora significativamente el proyecto del banco" aseguró.
BBVA ofreció a los accionistas de la entidad con sede en Alicante una acción de nueva emisión por 4,83 acciones de Sabadell. Todo en papel y nada de cash. Oliu consideró que estas condiciones no son "satisfactorias". Por tanto, "la hemos rechazado" sentenció en el vídeo. Se trata de la misma oferta que BBVA ha planteado en la OPA hostil de ayer.
"En el Consejo tenemos una gran confianza en la marcha del banco y en los planes que se están ejecutando en todos sus negocios y geografías. El Banco Sabadell es hoy una entidad fuerte, con futuro. Es una gran entidad y por eso os doy las gracias a todos vosotros" aseguró Oliu en un acto de defensa de su proyecto en solitario.
Oliu no está dispuesto a fulminar la marca Sabadell
Lo cierto es que era muy difícil de imaginar que, a sus 75 años, Josep Oliu fuera a estar dispuesto a poner el broche a su larga carrera con el hito de ser el responsable de la práctica desaparición de la enseña Banco Sabadell.
Aunque el presidente de BBVA, Carlos Torres, se comprometió ayer a "mantener la marca" Sabadell en los territorios donde tenga una justificación comercial, como Alicante o Valencia, el directivo ha confirmado que la provincia perdería su sede social en Alicante. Torres ha dicho que "mantendremos el máximo cuidado y pensaremos cómo asegurar el arraigo y el compromiso" con el territorio valenciano... pero eso no será suficiente.
"Está claro que cualquier oferta inicial iba a ser rechazada, pero en este caso, Oliu no se puede permitir la foto de un pintor borrando el logo del Sabadell bajo su mandato después de que él y su familia hayan estado ligados al banco durante tantos años" señala el director ejecutivo de Kreedit, Jordi Solé.
Y es que, el plan de BBVA con la entidad resultante sería crear una segunda sede operativa en Sant Cugat del Vallès (Barcelona) manteniendo la primera en Madrid y fulminando la actual, la de la alicantina avenida Oscar Esplá.
Cuando promovió un "Podemos de derechas"
Precisamente, con Oliu a los mandos, el Banco Sabadell fue una de las primeras grandes empresas en huir de Cataluña tras el desafío separatista del 1-O. Concretamente, fue el 5 de mayo de 2017 cuando el Consejo de Administración del banco decidió hacer las maletas ante la gran incertidumbre política y la retirada masiva de depósitos que estaba sufriendo el banco durante esos días.
El propio banquero explicó que, sólo durante la primera semana de octubre, su compañía perdió la friolera de 4.500 millones en depósitos, de los que el 57% procedía de clientes de Cataluña. A pesar de las presiones políticas, no ha entrado en sus planes volver. En Alicante "estamos muy bien" zanjaba el mes pasado por enésima vez.
En los últimos años, otra de las batallas que ha tenido que librar Oliu es la de la excesiva fiscalidad de la banca. El Gobierno de Pedro Sánchez ha elevado la parte de Sociedades que pagan los bancos y ha estrenado un impuestazo al sector que iba a ser temporal, pero que todo apunta a que se prolongará en el tiempo. Además, los bancos han sufrido todo tipo de descalificativos por parte del Gobierno.
Pero la animadversión de la izquierda contra la banca no es nueva. En pleno auge de Podemos en el año 2014, el partido de Pablo Iglesias ya planteaba ideas que espantaban a Oliu, como la creación de una banca pública y la toma de los organismos de dirección de la banca privada.
Por entonces, a juicio del banquero, ni PP ni PSOE estaban defendiendo "la actividad y la iniciativa privada" en España, por lo que Oliu aprovechó un evento del Círculo de Empresarios para plantear que "empieza a ser el momento de decir basta ya de regulación". El banquero criticó que "toda la iniciativa empresarial es sospechosa de crimen organizado habitual" mientras el "despilfarro y el gasto público" carecía de transparencia.
Oliu finalizó su intervención proponiendo en tono humorístico la creación de "una especie de Podemos de derechas" orientado a impulsar la iniciativa privada y al desarrollo económico, ya que "el Podemos que tenemos nos asusta un poco" bromeó en un discurso que fue muy comentado.
Para Jordi Solé, la OPA de BBVA sobre Sabadell "puede fracasar por dos motivos: por que la la impida el Gobierno o por que los accionistas no la acepten, lo que es muy probable porque es una oferta baja. El BBVA tiene margen para mejorarla, por ejemplo, incluyendo dinero en efectivo.
Por otro lado, Solé asegura que "las pymes, sobre todo, catalanas y con vinculación a esos bancos, son las que más sufrirán en caso de fusión porque es muy probable que la nueva entidad les cierre el grifo del crédito a la hora de renovar sus deudas porque la cuantía, y el riesgo, será mayor. Es lo que pasa siempre" avisa.