
La deuda acumulada por España con las empresas afectadas por el impago de los laudos que condenan a nuestro país por la retirada de las primas renovables crece de forma continuada debido a los intereses de demora. Estas obligaciones se han incrementado en 32 millones de euros durante los doce últimos meses, a raíz de la decisión del gobierno de negarse a desembolsar las indemnizaciones correspondientes.
La siguiente tabla presenta los datos referidos a esta cuestión, que fueron divulgados por las empresas e inversores afectados a lo largo de la III Conferencia sobre Energía Renovable, Seguridad Jurídica e Inversión, celebrada la pasada semana en un céntrico hotel de la capital de España.

Como se puede ver, las obligaciones acumuladas por este concepto ya ascienden a 158 millones y, lo que es peor, esta cifra ha aumentado en 32 millones. Por lo tanto, cada día que pasa añade obligaciones por valor de casi 90.000 euros, dando alas a nuevas medidas de compensación como el embargo de bienes y activos del Reino de España.
Los intereses de demora, casi inexistentes hace cinco años, han empezado a acumularse a raíz de la decisión del gobierno de impagar los laudos. En total, los 158 millones adeudados por el Reino de España a raíz de este concepto suponen aproximadamente un 10% de los 1.562 millones que nuestro país debe desembolsar solamente en concepto de indemnizaciones.
Además, nuestro país debe 80 millones por condenas en costas y ha gastado 70 millones contratando abogados y consultores, de modo que los sobrecostes financieros y legales derivados de la estrategia de impagos que ha adoptado la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, rozan los 310 millones.