El gobierno liberal de Argentina, liderado por el presidente Javier Milei, continúa desplegando su agenda de desregulación y simplificación normativa, con la reciente derogación de 43 normas que permitían la intervención estatal en mercados, el control de precios en productos de consumo, la regulación de costos de servicios y la imposición de requisitos informativos a empresas e instituciones educativas.
Las reglas eliminadas incluían distintas formas de control que incidían en los precios de los alimentos como carne vacuna y lácteos, así como las regulaciones que afectan al funcionamiento de comercios y supermercados o las disposiciones que golpeaban a los servicios de comunicación o las farmacias.
De acuerdo con la información recogida en un comunicado del Ministerio de Economía, las normas "dejan abierta la posibilidad de ser aplicadas para fijar precios, intervenir en la actividad privada y someter a los ciudadanos a requerimientos sin sentido", circunstancia que a menudo se ha aprovechado desde el poder para introducir medidas que han introducido enormes rigideces en el sistema de precios, empujando al alza la inflación.
Además de los cambios ligados al ámbito agroalimentario o al comercio y la distribución, las medidas específicas también destaca la derogación de regulaciones industriales, como por ejemplo las que encarecían el comercio de neumáticos. Todos estos decretos, normas y órdenes han sido considerados incompatibles con la política de simplificación del gobierno y han quedado eliminados.
Sumando estas 43 mejoras a las que ya se habían introducido en los últimos meses, se estima que Argentina ya habría eliminado 107 normativas con el objetivo de reducir trabas burocráticas y fomentar la libre competencia. Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado, ha calificado estas normativas como "confusas y onerosas", destacando en sus redes sociales que su eliminación representa "un alivio, tanto para el comercio como para los consumidores".
"Reportá la burocracia"
Como parte de su estrategia de desregulación, el ministro Sturzenegger lanzó recientemente en redes sociales la plataforma del programa "Reportá la burocracia", un buzón diseñado para recabar propuestas ciudadanas que ayuden a identificar aquellas normativas y procedimientos que obstaculicen el comercio y la competencia. En apenas ocho horas de funcionamiento, la web recibió más de 1.300 denuncias, evidenciando un amplio respaldo a las políticas de simplificación.
El secretario de Transformación del Estado y Función Pública, Maxi Fariña, explicó que "uno de los aspectos que concentra más denuncias es el de los permisos para las importaciones. Se exigen pruebas de homologación locales, aunque hablemos de productos que cuentan con certificaciones internacionales. Nos llegó el caso de un productor local que compró 30.000 dólares de juguetes y la tercera parte de esa cifra se fue a pagar esas acreditaciones. También, en el ámbito de la automoción, se compran partes de un coche para una reparación y después hay que homologarlas localmente, aunque ya han pasado los controles de calidad de marcas y fabricantes internacionales certificados y de gran prestigio".
Este modelo se inspira en la "Línea Abierta contra la Hiperregulación" implementada en Madrid bajo el liderazgo de Isabel Díaz Ayuso, la cual ya ha permitido la adopción de al menos 343 mejoras en la regulación autonómica y la Administración Pública regional.
Ley Hojarasca: el Congreso debate una amplia reforma normativa
En paralelo, el Ejecutivo ha enviado al Congreso la llamada Ley Hojarascas, un proyecto liderado por Sturzenegger que busca derogar 70 leyes obsoletas o restrictivas de las libertades individuales. Este paquete legislativo pretende modernizar el marco normativo, reducir la burocracia y eliminar organismos considerados ineficientes, promoviendo un entorno más favorable para el desarrollo del sector privado.
Entre las leyes propuestas para su derogación se encuentran:
- Ley de vacunación de la viruela, reemplazada por marcos legales más modernos.
- Ley sobre emisiones de televisión a color, superada por el avance tecnológico.
- Ley que permite supervisar reuniones privadas, considerada una violación a libertades individuales fundamentales.
- Regulación sobre mapas en etiquetas de productos, vista como una traba innecesaria para los productores.
- Normas que financian entidades como la Federación Argentina de Municipios, las cuales deberán autofinanciarse tras perder el apoyo estatal.
El término "hojarasca" simboliza el carácter inservible de estas regulaciones, comparándolas con hojas secas que deben ser removidas para permitir el crecimiento de nuevas ideas y proyectos.