
El apagón bochornoso y duradero que ha sufrido toda España este lunes ha recordado a otros cortes masivos que sufren dictaduras comunistas como Venezuela o Cuba o los fuertes apagones que sacuden a países tercermundistas como Pakistán, Indonesia, Filipinas o Bangladesh. Todo esto refleja la decadencia que ha sufrido España en el área energética y en los demás ámbitos a lo largo de los últimos 50 años.
Dejando a un lado la polémica Agenda 2030 y el abuso de las renovables en España, lo que ha quedado claro es que la gestión energética del Gobierno de Pedro Sánchez ha quedado ridiculizada a nivel internacional y muy cuestionada por los españoles. Y es que, este apagón nacional ha señalado la fragilidad de nuestras redes eléctricas.
Entrando en detalle, en los últimos años, varios países comunistas y tercermundistas han sufrido apagones masivos que afectaron a millones de personas. En 2023, Pakistán quedó completamente a oscuras durante un día, impactando a sus 230 millones de habitantes. Un año antes, en 2022, Bangladesh vivió una situación similar que dejó sin suministro eléctrico a unos 140 millones de ciudadanos. En Indonesia, un fallo en 2019 mantuvo sin luz a 120 millones de personas durante dos días. Sri Lanka tampoco se salvó: en 2020, un corte de energía dejó a sus 21 millones de habitantes sin electricidad durante una jornada entera.
En las dictaduras comunistas es el pan de cada día . En agosto de 2024, la Venezuela de Nicolás Maduro sufrió un apagón nacional que afectó al 80 % del territorio, incluyendo Caracas y la mayoría de sus estados, con interrupciones que se extendieron por hasta 20 horas en algunas zonas. Pocas semanas después, en octubre del mismo 2024, Cuba quedó prácticamente a oscuras durante varios días tras el colapso de su principal central termoeléctrica, afectando a unos 10 millones de personas.
En palabras de los propios ciudadanos cubanos: "Ya perdí la cuenta del tiempo que llevamos cocinando con leña o carbón, ni hablar del calor por las noches", relatan tras más de 48 horas de colapso energético en la isla. También ciudadanos venezolanos que atendieron a los micrófonos de Libertad Digital asegurando que muchos dicen estar ya "acostumbrados" a los apagones. Pues bien, ahora es España quien comienza a formar parte de esta bochornosa e indignante lista de países sumidos en el colapso energético, muchos de ellos con el comunismo o sistemas no desarrollados. Lo más preocupante es que una parte de la sociedad española está comenzando a normalizar estos episodios alarmantes. En España queda poca luz de esperanza.