El éxito del Real Madrid en la Champions League de 2021/2022 ha deslumbrado a Europa. Si repasamos las diez últimas temporadas, podemos ver que el equipo blanco se ha hecho con cinco de los títulos en juego, lo que ha supuesto una inyección de ingresos superior a los 500 millones de euros y ha favorecido un ciclo de crecimiento en el que ni siquiera la pandemia ha sido capaz de detener la ambición blanca.
En una España lastrada por problemas como el déficit crónico de las cuentas públicas, el Real Madrid ha dado ejemplo de austeridad y eficiencia, dos palancas que serán vitales para que el país en su conjunto vuelva al crecimiento y salga del marasmo en el que nos vemos sumidos como consecuencia de la nefasta gestión de PSOE y Podemos.
He ahí las dos grandes lecciones que deja Florentino Pérez a la clase política: la importancia de evitar los déficits presupuestarios, para mantener siempre la estabilidad económico-financiera, y la relevancia de la eficiencia en el gasto, que permite hacer más con menso y maximizar la rentabilidad de los desembolsos realizados. Si a eso se le suma el cultivo de una cultura ganadora, que no recela del éxito sino que lo celebra y lo exige, parece evidente que la ecuación del éxito merengue encierra lecciones muy valiosas para todo nuestro país.
1. Austeridad presupuestaria...
En un contexto en el que prácticamente todos los grandes equipos de Europa han visto cómo la caída de ingresos provocada por la pandemia se convertía en el catalizador de profundos déficits presupuestarios, el Real Madrid ha logrado esquivar las pérdidas y ha mantenido sus cuentas en orden:
- La temporada 2019/2020 se saldó con un descenso de 106 millones de euros en los ingresos del club, pero las cuentas arrojaron un simbólico saldo positivo de 313.000 euros.
- El ejercicio 2020/2021 terminó también con ganancias. Esta vez, el resultado positivo fue de 874.000 euros, nuevamente una cifra simbólica que permitió evitar un escenario de pérdidas.
- El año 2021/2022 contempla un superávit de 76 millones de euros, al calor de la recuperación de los ingresos y la contención de los desembolsos.
En los dos primeros ejercicios afectados por la pandemia, la caída de los ingresos llegó a acumular un desplome de más de 300 millones de euros. Sin embargo, Florentino Pérez y su Junta Directiva cogieron el toro por los cuernos, aplicaron medidas de contención del gasto y lograron consolidar una cultura de estabilidad económico-financiera en el momento más complejo. Y todo ello, además, mientras el fútbol europeo se llena de "dinero sucio" aportado por petrodictaduras que adulteran el mercado a base de incumplir sistemáticamente las reglas de fair play financiero, todo con la connivencia de la UEFA.
... y 2. Eficiencia en el gasto.
El Real Madrid también ha dado ejemplo en su gestión de talento. Aunque algunos de los "galácticos" incorporados por Florentino Pérez tuvieron un precio de adquisición elevado, lo cierto es que su trayectoria en el club ha sido tan exitosa que el coste inicial de sus incorporaciones se ha quedado en nada en comparación con los ingresos que han generado.
Es el caso de galácticos como Cristiano Ronaldo, Karim Benzema, Luka Modric, Toni Kroos o Gareth Bale, que han hecho historia en el equipo merengue y han sumado cinco títulos de Champions League desde su llegada a Concha Espina. No hay que olvidar que el coste de los jugadores se amortiza a lo largo de todas las temporadas que juegan en un equipo, de modo que la rentabilidad financiera de los fichajes está directamente relacionada con su durabilidad y rendimiento deportivo. En este sentido, a nadie escapa que los desembolsos realizados en la contratación de estas estrellas han sido algunas de las mejores inversiones en la historia del Real Madrid.
Algo parecido puede decirse de otros jugadores vitales para el equipo, caso de Thibaut Courtois, Marcelo, Casemiro o, más recientemente, Alaba, Militao o Camavinga, que llegaron al equipo madridista a cambio de cifras irrisorias. Y, no lo olvidemos, el equipo también ha demostrado gran inteligencia en su manejo de la cantera y de las jóvenes promesas, cuyo valor de mercado experimenta una revalorización media del 66% gracias a la gestión inteligente del club que preside Florentino Pérez. En este sentido, los desembolsos realizados para incorporar a Rodrygo (54 millones), Vinicius (45 millones), Ceballos (18 millones), Valverde (5 millones) o Asensio (4 millones) reflejan operaciones igualmente reseñables.
Una cultura ganadora
Steven G. Mandis, uno de los mayores expertos en gestión deportiva del mundo, escribe en La fórmula Real Madrid (Deusto, 2016) que otra de las claves del éxito de Florentino Pérez como presidente del Real Madrid ha sido el cultivo de una cultura de excelencia basada en la identidad madridista, la ambición competitiva y la apuesta por el crecimiento.
Esto no tiene solamente una lectura deportiva, sino también empresarial. Lo que buscaba el presidente blanco con la Superliga es un buen ejemplo de ello. Y algo parecido puede decirse del nuevo Santiago Bernabéu, llamado a elevar hasta en 150 millones los ingresos anuales del club.