La desaceleración económica internacional está afectando de lleno a las compañías tecnológicas. El Nasdaq-100, índice de referencia del potente sector tecnológico estadounidense, ha perdido en lo que va de año más de una cuarta parte de toda su capitalización bursátil.
Estas caídas han estado influenciadas por el menor apetito inversor en sectores especulativos y al fin del boom de digitalización experimentado con la pandemia. Además, muchas de las compañías tecnológicas han visto reducidos sus márgenes empresariales por la inflación, el incremento de los costes laborales y las recientes subidas de tipos de interés, que está encareciendo su financiación.
Para tratar de sobreponerse a este escenario, y en vistas de una posible recesión económica mundial, gran parte de las empresas tecnológicas han comenzado a recortar personal.
A este respecto, un reciente artículo en Bloomberg recopilaba algunas de las empresas que han frenado las contrataciones e iniciado despidos, tras años de crecimiento en la industria. Los directivos de los gigantes tecnológicos siguen así el paso de los grandes inversores internacionales, que, como informaba Libre Mercado, ya están preparados para la recesión.
En este sentido, Alphabet, la matriz de Google, informó de que disminuirá el ritmo de contratación en los próximos meses al "no ser inmunes a los vientos en contra de la economía". Microsoft también está eliminando ofertas de trabajo y reorganizando su plantilla, aunque este proceso se ha limitado al despido del 1% de los trabajadores.
Por su parte, Meta (Facebook) viene anticipando una recesión desde comienzos de verano y ha recortado un 30% la contratación de ingenieros, una política que también está aplicando Apple en vistas a una posible contracción. Además, Amazon afirmó en abril que necesitaba recortar personal tras las grandes contrataciones realizadas durante la pandemia.
Elon Musk, por su parte, comunicó que alrededor del 10% de los 100.000 trabajadores de Tesla podrían ser despedidos debido a un "mal presentimiento" sobre la economía. Mientras, Twitter, afectada por la incertidumbre sobre la adquisición por parte del propio Elon Musk, comenzó a rescindir ofertas de trabajo en mayo.
Como se puede percibir, el grado de ajuste en los gigantes tecnológicos no es muy exagerado gracias a su fuerte posición de mercado. Pero si tenemos en cuenta los despidos ejecutados por el conjunto del sector tecnológico, que incluye a multitud de empresas de menos solidez, los datos muestran un panorama preocupante.
De esta forma, si atendemos a las estadísticas recopiladas por el portal Trueup.io, que hace un seguimiento de los despidos en startups y empresas tecnológicas, se habrían producido más de 68.000 destituciones desde el mes de mayo. Como puede observarse en el siguiente gráfico, algunos de los despidos más relevantes han sido los de la compañía de delivery Getir, los de Tesla, así como los correspondientes al distribuidor de vehículos Carvana, los de Microsoft o los del exchange de criptomonedas Coinbase, entre otros.
Por su parte, la plataforma Layoffs.fyi rebaja la cifra de despidos a 43.000 desde mayo de este año. En cualquier caso, ambas fuentes coinciden en la fuerte subida de los despidos a partir de febrero de 2022, y de manera mucho más agresiva desde el mes de mayo. Se trata, por tanto, del mayor repunte desde el estallido de la pandemia en 2020. En aquel entonces, los despidos se centraron en startups dedicadas a trasportes, viajes o al sector minorista, mientras que ahora se expanden a muchas otras ramas.
