
Por lo visto, los 70.000 millones adicionales en deuda neta que emitirá España en 2023 le parecen poco al Gobierno. Hasta el punto de que, como recogen los Presupuestos Generales del Estado, el equipo de Pedro Sánchez se prepara para volver a usar el comodín verde.
Comodín de gasto y deuda pública, claro está. Y lo quiere hacer con nuevas emisiones de "bonos verdes", el último invento ecologista para disparar el gasto público.
El equipo económico de Pedro Sánchez cree que rondar el 120% de deuda pública sobre PIB es una situación idílica. Los Presupuestos así lo consideran y derrochan tranquilidad y alegría al trata las nuevas emisiones netas por valor de 70.000 millones. "La emisión neta del Tesoro Público se reduce en 5.000 millones de euros en 2023 pasando, por tanto, desde los 75.000 millones en 2022 a 70.000 millones", señalan los Presupuestos. "Desglosando por tipo de instrumento, se prevé que las Letras del Tesoro aporten financiación neta negativa por 5.000 millones, por lo que los Bonos y Obligaciones del Estado, junto con el resto de las deudas en euros y en divisas, aportarán los 75.000 millones restantes", detallan desde el Gobierno.
"De la suma de la financiación neta a través de Deuda del Estado y las amortizaciones resultan unas emisiones brutas del Tesoro Público en 2023 de alrededor de 256.930 millones de euros, un 8,2% por ciento más que las previstas para el ejercicio 2022", añaden. Pero eso les parece un punto de apoyo sólido para la economía española.
"Al igual que en los últimos años, el grueso de la emisión bruta prevista se concentrará en Letras del Tesoro y en Bonos y Obligaciones del Estado. Sin embargo, desde el estallido de la pandemia las emisiones de valores del Tesoro se han visto complementadas con nuevas fuentes de financiación procedentes de la Unión Europea (UE)", aclaran los Presupuestos.
El Gobierno reconoce el enorme grado de asistencia europea que está recibiendo: "Desde 2021 España está recibiendo un elevado volumen de transferencias procedentes de los fondos de la UE tras la pandemia en el marco del programa Next Generation EU (NGEU)". Y es que "en el periodo 2023-2026, dentro de este mismo programa, la UE nos concederá asimismo préstamos de carácter reembolsable. Las transferencias y préstamos del programa NGEU se utilizarán para el desarrollo de diversas medidas recogidas en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia en los próximos años. Antes de final de año se presentará una Adenda con nuevos proyectos de inversión y reformas", explican los libros de Presupuestos.
Pero, como esa montaña de deuda pública adicional le parece pequeña al Gobierno, se prepara ya para usar el comodín verde con tal de colocar más deuda pública: "Además, en 2022 el Tesoro ha reabierto mediante el procedimiento de subasta el bono verde, el cual fue emitido por primera vez en septiembre de 2021 y se ha convertido en un componente estructural de la estrategia de financiación del Tesoro". Y en 2023 vuelve a hacer acto de presencia: "Cabe esperar, por tanto, nuevas reaperturas del bono verde en 2023 para contribuir a la financiación de los compromisos de España con la transición ecológica".
El bono verde es un utensilio público para justificar más emisiones de deuda por cuestiones ecológicas. Un recurso muy práctico para incrementar el gasto con aún menos control: "El compromiso del Gobierno de España con la transición ecológica requiere la canalización urgente de un gran volumen de recursos financieros hacia una producción baja en carbono y los bonos verdes juegan un papel importante en este sentido", explica la documentación del Gobierno. "Se trata de valores de deuda pública, asimilables al resto de las emisiones soberanas, pero cuya emisión está asociada nocionalmente a programas específicos de gasto en actividades sostenibles, y en los que el emisor adquiere obligaciones en términos de información regular a inversores".
El Grupo de Trabajo del Gobierno desarrolló el Marco de Bonos Verdes del Reino de España, presentado al público en julio de 2021, y recibió, como no, "la máxima calificación posible y la mayor obtenida por un emisor soberano europeo hasta la fecha por parte de la entidad independiente Vigeo Eiris. La entidad destacó el elevado compromiso de España en materia de sostenibilidad y el elevado impacto medioambiental de los proyectos que se financiarán", señala el Gobierno.
En septiembre de 2021, el Tesoro realizó la primera emisión de un bono verde, por el nada despreciando importe de 5.000 millones de euros. Desde entonces, las emisiones han continuado en 2022 a través de las subastas del Tesoro por un importe aproximado de 10.000 millones de euros, considerando el impacto de la asignación en 2021. Suma y sigue.
El año 2023 seguirá por el mismo de gasto y deuda pública.