Libre Mercado sigue desnudando la campaña de la izquierda política y mediática contra el modelo de salud madrileño. Este diario ya puso encima de la mesa los siete grandes argumentos que desmontan la campaña que está en marcha y confirman la adecuada dotación y los buenos resultados del sistema. Además, hemos publicado las cifras referidas a los tiempos de espera, que se sitúan un 40% por debajo de la media nacional y mejoran un 17% durante el último año.
Pero la propaganda es tal que, pese al pinchazo de asistencia de la manifestación del 13 de noviembre, la evidente intencionalidad política de sus convocantes y el radicalismo de los participantes, sigue siendo preciso ir más allá y desentrañar la realidad de lo que está pasando. Por tanto, aquí van cuatro consideraciones adicionales que complementan las informaciones publicadas por este periódico en las últimas semanas.
Sánchez no mueve ficha ante la falta de médicos
Madrid ha presentado numerosas medidas al Ministerio de Sanidad para paliar la falta de profesionales en el Sistema Nacional de Salud. Este problema afecta a todos los españoles, no solo a los que residen en la comunidad gobernada por Isabel Díaz Ayuso. Sin embargo, desde la Administración Central no se ha ofrecido ninguna solución que contribuya a solucionar el problema. Por suerte para Madrid, muchos de los estudiantes de medicina eligen Madrid para desarrollar su carrera, pero esto no es suficiente para paliar el problema, porque unos 10.000 profesionales del sistema público regional se jubilarán en la próxima década y se antoja muy complicado reemplazar sus plazas.
La telemedicina, entre doctores sin carga de trabajo
Los Centros Sanitarios 24 Horas son el resultado de unir los Servicios de Atención Rural (SAR) y los Servicios de Urgencias de Atención Primaria. Los primeros dependen de la Gerencia de Atención Primaria y los segundos, del SUMMA 112. El gobierno madrileño constató que los SAR tenían mucha menos actividad que los SUAP, hasta el punto de que, en promedio, atienden menos de 8 pacientes en cada guardia de 12 horas (es decir, apenas un paciente cada 90 minutos). De ahí viene la necesidad de generar formas nuevas de gestión que aprovechen mejor los recursos económicos y humanos del sistema. La insistencia de los sindicatos de izquierdas en mantener el statu quo solo repercute en despilfarro y desatención para los pacientes madrileños.
No se derivan urgencias a los centros de salud
En los ochenta Centros Sanitarios 24 Horas no se atienden situaciones médicas propias de la atención en urgencias. De las 22.000 personas que han sido atendidas durante el último mes, el 99,9% han requerido revisiones o consultas al uso. De hecho, el 55% de estas atenciones se correspondieron con cuidados de enfermería. Solo en el 0,1% de los casos fue necesario un traslado a urgencias. Cabe recordar, por otro lado, que los centros de salud cierran en Madrid a las 9 de la noche, mientras que en buena parte de España lo hacen a las 3 de la tarde.
El bandazo sindical
Las condiciones bajo las que funcionan los Centros Sanitarios 24 Horas fueron suscritas por cuatro de los cinco sindicatos de profesionales médicos después de tres reuniones de trabajo entre dichas organizaciones y la Comunidad de Madrid. Solo AMYTS, conocido por su marcado perfil izquierdista, se opuso. Sin embargo, la operación política que se ha puesto en marcha desde entonces ha generado una grave disrupción, puesto que las bajas repentinas de médicos llegaron a alcanzar el 60% de la plantilla diaria. Sin previo aviso ni justificación declarada, se dio por roto el acuerdo a pesar de que el nuevo modelo había sido negociado, pactado, firmado y ratificado. Y, aunque la Comunidad de Madrid ha puesto encima de la mesa distintas propuestas encaminadas a frenar las protestas, los sindicatos no se han sentado a negociar.
"Que se entere la Comunidad de Madrid, si no los tumbamos en el mes de mayo, vamos a seguir luchando. ¡Sí se puede!".
La manifestación por la sanidad pública en Madrid parece que es un mitin de Podemos.🤦🏻♂️ pic.twitter.com/HOrsBYGcx1
— Toni Cantó (@Tonicanto1) November 13, 2022