Mientras España sigue siendo el único Estado miembro de la UE que no ha recuperado el PIB previo al covid y mientras ha sido consagrado por la OCDE como el país con mayor pérdida de poder adquisitivo de las familias desde antes de la pandemia, un estudio de la consultora Freemarket acaba de demostrar que la inflación, por culpa de las medidas adoptadas por el Gobierno de Pedro Sánchez, ha castigado con especial intensidad a las rentas bajas y en menor medida a las rentas altas. En concreto, los hogares con menores rentas soportan una subidas de los precios un 16,5% superior a la inflación de los hogares con mayores ingresos.
El estudio de la consultora señala que en sus cálculos "se incluyen los resultados obtenidos por el Banco de España sobre los efectos de la inflación y de las medidas adoptadas por el Gobierno para aliviar el impacto de la crisis sobre las economías familiares". Y las conclusiones son rotundas: "En primer lugar, se observa cómo ha golpeado la subida de la inflación a cada tipo de hogar en función de sus patrones de gasto en los diferentes hogares y su efecto en la inflación experimentada" y en el "30% de hogares de menor renta la inflación experimentada ha sido de 11,3 puntos". En el "30% de hogares de mayor renta", sin embargo, el dato queda en un "9,7%". En resumen, la subida de los precios ha sido un 16,5% superior en las familias más pobres que en las más acomodadas.
IVA del gas y la electricidad
Freemarket analiza más aspectos de la política de Sánchez. "El IVA de la electricidad se rebajó del 21 al 5 por 100 desde julio de 2021 hasta diciembre de 2023. El IVA del gas se rebajó del 21 al 5 por 100 desde octubre de 2022 hasta diciembre de 2023". Y estas medidas también han tenido consecuencias dispares por tipos de hogares. Para el 30% de hogares con mayor renta la ganancia medida en impacto presupuestario total fue de 2.055 euros durante el periodo de aplicación. Pero para el 30% de hogares de menor renta se reduce a 1.484 euros. "Conclusión: los hogares de mayor renta se beneficiaron un 39 por 100 más de los recortes realizados en el IVA que los hogares con menor renta. Esto se debe a que los hogares con mayor renta gastan más en estos bienes en términos absolutos".
IVA de los alimentos básicos
"En tercer lugar, el estudio analiza la de rebaja del IVA de los alimentos básicos: en concreto, el IVA de determinados alimentos se redujo del 10 al 5 por ciento mientras que el de otros pasó de un 4 a un 0 por 100. La duración de la medida es de seis meses desde enero hasta junio de 2023 (con la salvaguarda de que finalizaría en abril de 2023 si la inflación subyacente de marzo fuese inferior a 5,5 por 100)", aclara el informe.
Y el resultado vuelve a aflorar consecuencias negativas para Pedro Sánchez: la ganancia del 30% de hogares de mayor renta se eleva a 240 euros y la de los de menores ingresos queda en 142, "generando una mayor ganancia para los hogares más acomodados de un 70%", concluye el estudio.
Bonificación precio de los carburantes
"En cuarto lugar, se analiza el impacto presupuestario de la bonificación del precio de los carburantes en el caso de los hogares: 20 céntimos por cada litro de carburante consumido. La duración de la medida fue de abril a diciembre de 2022".
Y ocurre lo mismo: "Conclusión: los hogares de mayor renta se beneficiaron un 192 por 100 más de esta medida que los hogares con menor renta. Esto se debe a que los hogares con una menor renta dedican una menor proporción de su gasto total al consumo de carburantes.
Subida tipos de interés
El estudio analiza igualmente "la subida de los tipos de interés en curso", que "supone un deterioro comparativamente mayor para los hogares endeudados con rentas medias y bajas. Esta situación tenderá a acentuarse a medida que el BCE siga aumentando las tasas de interés, prosiga la reducción de su balance y ambas medidas se trasladen, como ya ha comenzado a suceder, al Euribor. Esta es una de las razones por las cuales el Gobierno se está planteando la introducción de otra medida intervencionista": la de limitar los tipos de las hipotecas.
Familias con baja intensidad de trabajo
Por último, el informe señala que "también es importante observar la trayectoria de otro indicador relevante, el de las personas que viven en familias con muy baja intensidad de trabajo, esto es, aquellas de 0 a 59 años que viven en hogares en los que sus miembros en edad de trabajar lo hicieron menos del 20% de su potencial total de trabajo".
Este indicador "se calcula a través del número de meses en los que los miembros del hogar han estado trabajando durante el año de referencia con respecto al total de meses en los que teóricamente esos mismos miembros podrían haber trabajado. La conclusión extraíble es clara: la intensidad del factor trabajo se ha reducido no sólo respecto al año anterior a la pandemia o a la existente en ese ejercicio sino con posterioridad a él".