El cine español es una de esas industrias de la economía que generan una gran confrontación entre dos grupos de la población marcadamente identificados, como lo pudiera ser también la tauromaquia. Es un mundo en el que buena parte de sus caras más reconocidas, o al menos las que más se muestran de cara al público, son abiertamente de ideologías izquierdistas y hacen campaña en favor de los partidos de izquierdas.
Esto lleva a que se formen, como si de un partido de fútbol se tratase, dos hinchadas: la de izquierdas y la de derechas. Parece que si uno es de izquierdas tiene que defender el cine español y que si es de derechas lo tiene que atacar. En este sentido, son frecuentes las críticas al cine español por las subvenciones que recibe en comparación con los ingresos que acaban recaudando en taquilla. Pero ¿tienen fundamento estas críticas o son meramente ataques sin sentido con el fin de difamar? En este artículo vamos a tratar de averiguarlo.
Si acudimos a los Presupuestos Generales del Estado más recientes (aquí los de 2022 o 2023), podremos comprobar como el presupuesto de ayudas a la industria cinematográfica en los últimos cuatro años (desde 2020 hasta 2023) fue de 85,68 millones de euros en el año 2020, de 86 millones de euros en el año 2021, de 97 millones de euros en 2022 y de 167 millones de euros en 2023. Estas cifras hacen un total de 435 millones de euros en favor del cine español.
Por otro lado, si nos fijamos en los datos proporcionados por el Ministerio de Cultura nos encontramos con que la recaudación en 2020 fue de 39,4 millones de euros, en 2021 lo fue de 39,7 millones de euros, en 2022 de 77,5 millones de euros y en 2023 la recaudación ascendió a 82,4 millones de euros, lo que hace un total de 239 millones de euros recaudados. Veámoslo gráficamente:
Como podemos ver en el gráfico, la tendencia desde el año 2020 es que las subvenciones recibidas por la industria del cine español son superiores a la recaudación que la propia industria es capaz de recaudar en las distintas salas de cine. La cinematografía española acumula así un "saldo negativo" de 196 millones de euros, habiéndose incrementado considerablemente este saldo negativo en el último año. De esta manera, el cine español habría recibido en 2023 el doble de subvenciones en comparación con la recaudación obtenida en la taquilla, con 167 millones de euros de ayudas estatales por 82,4 millones de euros en recaudación. Viendo estos datos, no es de extrañar que los miembros más representativos del cine español (directores, actrices, actores, etc.) tengan discursos tan favorables al actual Gobierno del PSOE y de Sumar, dado que ha sido este Gobierno el que ha duplicado el presupuesto en apenas dos años.
En este punto habría que añadir una información adicional, y es que cuando se habla de la "recaudación obtenida por el cine en la taquilla" nos estamos refiriendo única y exclusivamente a las ganancias (o los ingresos) que obtiene la industria del cine, no tiene nada que ver con la recaudación de impuestos por parte de la Agencia Tributaria.
Por lo que si se quiere argumentar que el cine español devuelve en impuestos más de lo que recibe en subvenciones, se tendría que hablar de una cifra inferior a la de 82,4 millones (en 2023), ya que la cantidad recaudada por Hacienda no va a ser superior a los ingresos que esta industria es capaz de generar. A esto hay que sumarle que el IVA del cine está rebajado al 10% (con lo que la recaudación por este impuesto se ve afectada de forma negativa) y que se pueden aplicar otro tipo de deducciones fiscales en el Impuesto de Sociedades por inversiones en producciones cinematográficas.
Por tanto, hemos comprobado a lo largo del artículo como el cine español recibe más en ayudas estatales de lo que es capaz de generar en ingresos como consecuencia de su actividad económica, y que esta es una tendencia que se viene observando desde el año 2020, aunque ya desde el año 2016 se ve claramente como las subvenciones empiezan a ganarle terreno a la recaudación en taquilla. Todo esto vendría a chocar con los constantes intentos por parte de la prensa de izquierdas de hacer creer al ciudadano que el cine español devuelve a las arcas públicas mucho más de lo que recibe.