La adicción de los políticos por la deuda pública sumada a las sistemáticas subidas de los tipos de interés que comenzó a ejecutar el BCE en 2022 (y que ya ha paralizado) ponen en jaque los presupuestos de las CCAA. Así, lo advierte un informe que publicó Fedea ayer lunes, y que pone de manifiesto el aumento "considerable" que tendrá la partida de gasto en intereses de cada una de las regiones de España.
El think tank señala que el gasto en intereses de las CCAA ha aumentado en un 60% entre 2022 y 2023 (desde 0,28% PIB de 2022 hasta el 0,44% de 2023) y ha elaborado un simulacro sobre lo que ocurrirá en los próximos años ante este encarecimiento del endeudamiento. Para llevar a cabo este análisis, Fedea ha utilizando unos supuestos que consideran "conservadores respecto al escenario actual y, en cierta medida, optimistas respecto al comportamiento fiscal de las CCAA". Por ejemplo, uno de ellos es que las CCAA vayan a cumplir los objetivos de referencia fijados en la nueva senda de déficit en los próximos años, que es el 0,1% para los años 2025-2027 y, para el año 2024, suponen que las CC.AA. cerrarán con un déficit del 0,3% previsto por la AIReF.
La primera conclusión a la que llegan es que el volumen de deuda absoluto aumentará en 28.351 millones de euros entre 2027 y 2022. Esto se explica por el aumento del nivel de deuda observado entre 2023 y 2022 (8.145 millones de euros), la necesidad de financiación del déficit previsto en 2024 junto con los déficits pendientes de ejercicios anteriores (11.353 millones), el pago de las liquidaciones 2008 y 2009 aplazadas a veinte años (3.774 millones) y la necesidad de financiar los déficits previstos entre 2025-2027 (5.079 millones). Esto daría lugar a un montante de deuda pública de la friolera de 345.440 millones de euros en 2027.
Cataluña, la región con el mayor pasivo de España
En la tabla anterior se observa que Cataluña era, con diferencia, la comunidad autónoma con el mayor volumen de deuda de España en 2022 (84.5183 millones) y que lo seguirá siendo en 2027, cuando habrá aumentado su deuda hasta los 90.421 millones de euros.
Esta es una de las grandes bombas de relojería a las que se tendrá que enfrentar Salvador Illa como presidente de la Generalidad: una región con el mayor pasivo de España y en la que se multiplicará el pago de intereses.
Así, si en 2022 el gasto total autonómico en intereses ascendió a 3.608 millones de euros, Fedea estima que esa cifra se incrementaría hasta los 12.037 millones de euros en 2027. Esto significa multiplicar por 3,3 los recursos que se dedicaron en 2022 a satisfacer los gastos financieros de la deuda pública autonómica.
"Los factores que guían este cambio son dos: el importante aumento de los tipos de interés al que ya se están enfrentando las haciendas autonómicas y cuyo nivel suponemos que se mantendrá en los próximos años, y el elevado volumen de deuda pública" explican.
De nuevo, observamos que Cataluña es la autonomía donde más aumentará el coste del pago de intereses en los próximos años. En concreto, la región de Illa triplicará esta partida desde los 1.029 millones de euros actuales hasta los 1.928 millones, un 187% más. En términos porcentuales destacan los incrementos de La Rioja (739%), Canarias (549%), Castilla La Mancha (431%) y Valencia (424%).
La región más dependiente del FLA (del Estado)
Respecto al tipo medio de la deuda pública autonómica (definido como el cociente entre el pago anual de intereses y el stock de deuda pública a cierre del año), Fedea señala que fue del 1,1% en 2022 y ascenderá hasta el 3,5% en 2027. "Esto significa un coste de más del triple del actualmente vigente. Destaca el aumento de los tipos por encima del 4% de: Asturias, Canarias, Castilla y León y Madrid" señalan.
Hay que recordar que la Comunidad de Madrid está fuera del paraguas del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA), el instrumento ideado por Cristóbal Montoro en 2012 para facilitar el endeudamiento de las autonomías a través del Estado. O dicho de otra forma, para evitar que quebrara.
A pesar de que el fin último de los independentistas es separarse del resto de España, lo cierto es que Cataluña es la región más dependiente del FLA, es decir, del Estado. Para conseguir el apoyo de los separatistas, no hay que olvidar que Sánchez les ha prometido la condonación de la friolera de 15.000 millones de euros de parte de la deuda que tienen con este mecanismo. El estudio de Fedea no tiene en cuenta ningún tipo de condonación que, de llevarse a cabo, trasladaría el coste de los intereses de deuda al Estado.
"Las CCAA deben calibrar con mucha prudencia todas las políticas fiscales expansivas que ahora y en los años venideros pueden desarrollar" apunta Fedea. "En los próximos ejercicios deberán abordar un proceso de consolidación fiscal con el objetivo de reducir su nivel de deuda y situarlo en el 13% fijado en la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera (LOEPSF)", añaden. Además, "entre las tareas pendientes que se deberían abordar con urgencia se encuentran: la reforma del sistema de financiación pendiente y el regreso al mercado de las CCAA. Sin embargo, este proceso no tendrá éxito sin la puesta en marcha de un proceso creíble de consolidación fiscal".
Fedea insiste en que "las CCAA han de ser conscientes de que el recorte vía gasto resulta más que complicado en un contexto como el actual con gastos sanitarios y sociales al alza derivados del envejecimiento de la población, el aumento esperado del gasto en intereses y, además, el reducido gasto en inversión. Por todos estos motivos, consideramos que es prioritario la puesta en marcha de una estrategia fiscal creíble a medio plazo que garantice la sostenibilidad de las cuentas públicas". Illa es el primero que deberá tomar nota.