La llegada del PSOE al poder ha supuesto, una vez más, la llegada de malas cifras económicas y peores principios: su planteamiento de que no pasa nada por gastar por encima de los ingresos y disparar la deuda ha dado paso, curiosamente, a gastar por encima de los ingresos -déficit desbocado de 82.819 millones de euros en el último ejercicio cerrado- y a disparar la deuda -30.157 euros de deuda pública per cápita, frente a los 25.755 euros del año 2018 en el que llegaron al poder-. Y ahora, ese mismo partido ha decidido que debe educar a los niños precisamente en gestión. Porque sólo ellos, y con esos datos como aval, son los que pueden educar a los españoles para que "gestionen adecuadamente su dinero".
El PSOE ha presentado ya su documento en el Congreso de los Diputados. Y su redactado es todo un ejemplo de orgullo en la gestión: "En nuestra vida cotidiana la cultura financiera es básica para poder desenvolvernos con cierta autonomía, confianza y seguridad", señalan los socialistas, que, humildemente, aseguran que "es escasa la cultura financiera que tenemos en España". La de los demás, claro, no la suya. Y esa falta de conocimientos, de los demás, claro está, "deriva de una limitada educación financiera y escasa formación en nuestra trayectoria vital y profesional".
"El Banco de España y la CNMV han vendido desarrollando desde el 2008 planes de actuación para aumentar la cultura financiera de la población". Es más, "a estos planes se ha venido incorporando el Ministerio de Educación y Formación Profesional mediante convenios de colaboración", apunta el partido del presidente que ha batido el récord de asistencia del BCE (cerca de medio billón de euros destinados desde la pandemia para comprar deuda pública y reforzar la actividad financiera en los bancos).
Por estos convenios, afirman, "algunos contenidos de educación financiera y emprendimiento están ya presentes en los currículos educativos. Con el apoyo del Ministerio de Educación y Formación Profesional y las Consejerías de las CCAA, el Plan de educación Financiera organiza cada curso su Programa Escolar de Educación Financiera, al que los institutos y centros educativos de toda España pueden apuntarse gratuitamente, de forma voluntaria y flexible".
Es más, el muy avalado "Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital" junto al Banco de España y la CNMV "remitieron recientemente al Ministerio de Educación y Formación Profesional una propuesta de ampliación de contenidos relacionados con la formación financiera en el currículo escolar y que los estudiantes en Educación Obligatoria, Primaria y Secundaria, reciban contenidos relacionados con la formación financiera".
El PSOE señala que en todos esos programas y en los nuevos a lanzar se debe perseguir que "los alumnos de Educación Primaria tengan conocimientos como "comprender el papel que el dinero juega en nuestras vidas" o "gestionar adecuadamente el dinero", para desarrollar la confianza, las habilidades y conocimientos que necesitan para administrar su dinero". Y que los estudiantes de la Educación Secundaria tengan conocimientos como "planificar y utilizar los ingresos y otros recursos a corto y largo plazo para mejorar el bienestar financiero", "gestionar los riesgos financieros", o "conocer los distintos productos financieros".
Es más, hasta el "Ministerio de Consumo" del economista Alberto Garzón, "suscribió un convenio en enero de 2021 con el Banco de España y la CNMV, con el fin de desarrollar y extender el Plan de Educación Financiera entre las personas consumidoras y ciudadanía en general".
Y, en base a todo ello, el Grupo Parlamentario Socialista pide ahora que el "Gobierno, en colaboración con las comunidades autónomas, el Banco de España, y la Comisión Nacional del Mercado de Valores "amplíen los planes actuales de educación financiera que potencien el esfuerzo en promover la cultura financiera en los ciudadanos" y refuercen "los contenidos de educación financiera en los currículos de enseñanza primaria y secundaria en el sistema educativo".
Porque el PSOE se siente avalado económicamente para educar a los menores en la "gestión adecuada" del dinero.