Fiesta en Hacienda. La arcas del Estado ingresaron en 2022 la friolera de 255.463 millones de euros, lo que supone un 14,4% más de lo recaudado en 2021 y todo un hito para el departamento de María Jesús Montero.
Que el fisco se haya embolsado 32.078 millones de euros más que en el ejercicio anterior es la prueba irrefutable de los pingües beneficios que se está anotando Hacienda gracias a la desorbitada escalada de precios que está asfixiado a empresas y particulares. De hecho, esta cifra ha quedado por encima de la avanzada por el Secretario de Estado de Hacienda, Jesús Gascón, a principios de mes. El incremento de la recaudación del 14,4% es próximo al que se registró en 2021 (15,1%), pero hay que tener en cuenta que en ese año la comparación se realizaba frente a un año afectado plenamente por la pandemia, por lo que esta subida tiene mucho más mérito.
Aunque en el Gobierno se hayan empeñado en achacar la escalada de los precios a la invasión a Ucrania (finales de febrero de 2022), la realidad es muy distinta porque la inflación empezó a dar las primeras señales de alarma en 2021. Mucho antes de lo que pretenden vender.
En diciembre de 2022, cuando Hacienda se anotó el mayor récord de ingresos de su historia, el IPC cerraba en el 5,7%, aunque la subyacente terminaba disparada en el 7%. Estos dos resultados provocaron un cruce insólito en las estadísticas de precios que todavía se mantiene. Que la inflación subyacente (que es la que excluye los precios de la energía y de los alimentos, es decir, la volatilidad) continúe desde entonces por encima del IPC general sólo confirma que la escalada de precios sigue extendiéndose por todas las ramas de la economía y que será muy difícil revertirla.
Sin embargo, Hacienda ha recogido los frutos de esta situación. En siguiente cuadro, publicado por la Agencia Tributaria este jueves, se observan todos los ingresos tributarios uno a uno. IRPF, IVA, Hidrocarburos, Tabaco... el departamento de María Jesús Montero obtiene suculentas ganancias en todas las partidas tributarias.
La única excepción en la tabla es el Impuesto Especial sobre la Electricidad que el Gobierno se vio forzado a rebajar en 2021 debido a la crisis energética y que ha caído un 79%. Sin embargo, el aumento de recaudación en los demás epígrafes compensa sobremanera la pérdida de ingresos. Las arcas del Estado recuperan de sobra los 856 millones que faltan por esa vía.
Los impuestos uno a uno
En el caso del IRPF, los ingresos por el impuesto estrella de Hacienda crecieron en 2022 un 15,8% hasta alcanzar los 109.485 millones (en octubre el IRPF rompió la barrera de los 100.000 millones por primera vez). "Las principales razones que explican el crecimiento son el aumento de las rentas del trabajo (salarios y pensiones), los buenos resultados de la declaración anual de 2021 presentada a finales de junio de 2022 y el incremento de los beneficios de las empresas personales" señala el Gobierno para explicar esta subida. Sin embargo, el Ejecutivo de PSOE y Podemos obvia que, desde que comenzara la tormenta inflacionista, se han negado en redondo a deflactar la parte estatal del IRPF que está actuando como un impuesto en la sombra para los trabajadores.
Y si hay un impuesto del que se beneficia exponencialmente Hacienda con el aumento de precios, ese es el IVA. En 2022, este tributo indirecto recaudó un 13,9% hasta los 82.595 millones. Otro éxito de Montero.
En el caso de Sociedades, los ingresos por este impuesto crecieron un 20,8% hasta situarse en los 32.176 millones. Por su parte, los Impuestos Especiales crecieron en conjunto durante 2022 un 2,5% hasta los 20.224 millones.
En el Gobierno niegan los beneficios de la inflación
A pesar de estos resultados, en el Gobierno aseguran que "el impacto de la inflación no fue el elemento más determinante en la recaudación, y que contribuyó solo en 5 puntos a la recaudación", una tercera parte. "De hecho, los impuestos que más aumentaron fueron Sociedades e IRPF, vinculados al buen comportamiento de la economía y el empleo" destacan, aunque la recaudación por IVA casi triplique a la de Sociedades y de que el aumento recaudatorio de este impuesto fue similar al del IRPF.
La versión gubernamental contrasta con los cálculos de la Airef que afirma que "en torno al 50% del incremento de la recaudación de 2022 se debe a la inflación, mientras que en 2023 la cota se eleva al 75%, teniendo el repunte de precios mayor impacto en los ingresos públicos en el año próximo. "Sí que hay un componente muy grande asociado al nivel de precios", afirmaba hace unos meses la presidenta de la Airef, Cristina Herrero. Este récord tributario ha permitido al Gobierno reducir el déficit hasta el 4,81% del PIB, lo que supone un agujero todavía de 63.776 millones de euros, incluida la ayuda financiera