Todo un arte. Así es la política fiscal del Gobierno de Pedro Sánchez. El problema es que es un arte del engaño porque, lejos de haber diseñado un esquema tributario que permita la generación de empleo y riqueza, ha generado uno con el que afirma que baja el IVA de los hogares para combatir la inflación en los alimentos y la energía -en 1.854 millones- pero lo cierto es que con la otra mano usa la misma inflación para elevar el pago del IRPF de las mismas familias en 7.204 millones. Todo un arte: del engaño fiscal.
El dato aparece perfectamente reflejado en el último informe mensual de recaudación de la Agencia Tributaria (AEAT). Allí se puede ver como, en los ocho primeros meses del año 2023, la rebaja del IVA de algunos alimentos -ni la carne ni el pescado- ha supuesto un volumen de ayuda real a las familias vía reducción del pago del IVA de "1.165 millones de euros".
Por otra parte, el mismo informe cuantifica el efecto de ayuda por la rebaja del IVA relacionado con la energía o calefacción (electricidad, gas natural, madera y pellets): "689 millones de euros". Eso significa que todo el apoyo a los hogares contra la inflación por parte del Gobierno de Pedro Sánchez se limita a 1.854 millones de euros entre enero y agosto.
Pero, justo en la siguiente página del informe se puede apreciar la subida de la recaudación del IRPF en el mismo periodo del presente año. Una evolución que está marcada de forma principal por el impacto de la inflación en los sueldos, el salto de tipo aplicable en la escala del Impuesto de la Renta y la devaluación de las deducciones fiscales todo ello por culpa de la negativa del Gobierno socialista-comunista a actualizar el IRPF con la inflación. Y la subida es de nada menos que 7.204 millones de euros. Es decir, que por cada euro que dice que baja en impuestos para ayudar a combatir la inflación, recauda casi cuatro más -3,88 euros- por la subida del IRPF gracias a la inflación.
El informe de la Agencia Tributaria aclara que "el crecimiento [de la recaudación del IRPF] en agosto fue intenso, como lo fue en los meses anteriores a pesar del freno a los ingresos que suponen los cambios normativos y de gestión". Por cambios normativos se refiere a las pocas medidas de supuesto alivio fiscal lanzadas por el Gobierno. Aún así, el informe llega a evaluar como sería el panorama "sin estos cambios" y "los ingresos estarían creciendo a un ritmo superior al 13%". Todavía más, destaca el estudio.
"Como se ha señalado anteriormente, son las retenciones sobre los rendimientos del trabajo y de las actividades económicas las protagonistas del crecimiento. En agosto aumentaron un 11,3%, que es la misma tasa que se registra para el conjunto del año", asegura el estudio. "En las Grandes Empresas (que son las únicas del sector privado que presentaron declaración en este mes) el incremento fue del 10,4%, inferior a los que se venían observando en los últimos meses y en el acumulado desde enero (11,3%)".
Por su parte, "en las AA.PP. las retenciones crecieron en agosto un 12,9%, lo mismo que en el periodo enero-agosto, confirmando la tendencia de estabilidad que se ha destacado en informes anteriores. Aun dentro de ese tono estable, en la parte salarial se aprecia en los dos últimos meses una cierta moderación consecuencia de un menor incremento en el rendimiento medio, que en el año está en el entorno del 5%, pero en los últimos meses no ha alcanzado el 4,5%", destaca el informe. "En las retenciones ligadas a las pensiones públicas, en cambio, se mantienen inalterables las cifras que se observan desde febrero.
El crecimiento es cercano al 19%, resultado de un aumento de la masa de pensiones próximo al 11% y una subida del tipo efectivo de algo por encima del 7%. Hay que recordar, además, que este incremento del tipo está afectado por la rebaja de las retenciones a las pensiones más bajas, cuyo impacto se estima, hasta agosto, en 457 millones", aclara para los pensionistas.