El independentismo catalán celebra que ha cumplido su gran sueño gracias a Pedro Sánchez. El PSOE ha pactado con la gestión, recaudación y liquidación del 100% de los impuestos que se pagan en Cataluña, lo que supone una ruptura en el sistema de financiación autonómica sin precedentes en España.
Ambos partidos han explicado esta semana los detalles del acuerdo, aunque todavía falta por conocer dos cifras claves: a cuánto ascenderá el cupo y la llamada "cuota de solidaridad temporal" que los independentistas estarán dispuestos a abonar al Estado a cambio de salir del régimen común. Como ocurre con el caso del País Vasco y Navarra, cabe esperar que establezcan una fórmula poco transparente y con la que, por supuesto, salen ganando.
Lo que sí ha calculado la consejera de Economía y Hacienda de la Generalidad en funciones, Natàlia Mas, es la cantidad de ingresos que va a obtener su región tras el trato con Sánchez. La encargada de llevar a cabo la desconexión financiera de Cataluña de España ha cifrado en unos 60.000 millones los ingresos con los que se va a hacer Cataluña tras quedarse con todos los impuestos.
Así, lo ha explicado en su cuenta de Twitter, en la que señala que de ese importe se descontarían los dos fondos antes mencionados de los que no se conocen detalles.
El primer impost que s'assumiria seria l'IRPF del 2025: l'ATC passaria de recaptar el 9% dels impostos al 53%, el que suposaria un salt d'escala substancial.
Es descarta la creació d'un Consorci tributari amb l'Estat, que podia ser una cortina de fum perquè res canviés.
— Natàlia Mas Guix (@nataliamasguix) July 30, 2024
Lo primero, el IRPF
Mas ha asegurado también que el primer impuesto que Sánchez va a permitir controlar a Cataluña es el impuesto estrella de Hacienda: el IRPF. Cataluña asumiría ya en 2025 el control del tributo por el que más recaudan las regiones, "lo que implicaría que la Agencia Tributaria de Catalunya pasará de recaudar el 9% de los impuestos al 53%" asegura la independentista.
Esto "descarta la creación de un Consorcio tributario con el Estado", como planteaba Illa, "que podía ser una cortina de humo para que nada cambiara" añade Mas.
Los inspectores de la Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) de España, el único organismo válido, están espantados ante la ruptura de la Agencia Tributaria que está a punto de perpetrar Sánchez. "El concierto con Cataluña supone la desaparición de la Agencia tributaria de ese territorio rompiendo la institución que mejor funciona en la Administración pública" aseguran.
La paciencia (y el dinero) de Madrid no son infinitos
Por ello, la Asociación Profesional del Cuerpo Superior de Inspectores de Hacienda del Estado (IHE) pedirá responsabilidades ante "ese destrozo del sistema tributario y de la Agencia Tributaria al Gobierno y a la ministra de Hacienda quien lleva meses diciendo que no iba a existir un concierto económico con Cataluña" recuerdan.
Esta asociación avisa de que "no va a permitir que esta ruptura se produzca" y está dispuesta a "utilizar todos los medios legales oportunos para impedir que esta situación siga adelante, velando, especialmente, por los compañeros que están allí destinados quienes no son, ni serán nunca, funcionarios de una supuesta Agencia tributaria catalana nacional, que no tiene cabida en nuestro ordenamiento jurídico por más que se quiera forzar y engañar a la ciudadanía con argumentos falaces".
Uno de estos "argumentos falaces" es el de la consejera de Hacienda, que ha asegurado que "el Estado tiene capacidad económica suficiente para que Cataluña logre la plena soberanía tributaria sin que otros territorios pierdan recursos". Teniendo en cuenta que los independentistas, pretenden hacerse con más de 26.000 millones de ingresos extra que antes no tenían, cabe preguntarse cómo es posible que el resto de CCAA no vayan a sufrir esa merma de ingresos. Cabría preguntarse si lo que planea Sánchez es que ese diferencial corra a cargo de la Comunidad de Madrid, la mayor aportadora neta del sistema.