El Gobierno asegura que ha bajado los impuestos de las clases medias y trabajadoras. Que sólo le sube los impuestos a los "poderosos", como las eléctricas y los bancos. Pero los datos de la Agencia Tributaria no dicen eso, ni mucho menos. Esos datos oficiales del Fisco español hablan de un incremento de recaudación total sobre la población, pymes y grandes empresas españolas de 16.534 millones de euros hasta la mitad del año. En pleno desastre por los precios de la energía y la escalada descontrolada de la inflación.
De ese brutal aumento de recaudación fiscal, 6.993 millones proceden del IVA que pagan todos los consumidores finales. Y un importe muy cercano y disparatado, 5.939 millones, del IRPF que pagan todos los trabajadores. Traducido: el Gobierno hace caja con la inflación que soporta toda la población. No los "poderosos". Y mientras las subidas pactadas en convenio apenas superan los 2,5 puntos, el cobro por el IRPF crece en seis meses un 15,8%. Es decir, que, cuando menos, el Gobierno está haciendo pagar a los españoles un 13% más por IRPF hasta junio aprovechando la inflación.
Los convenios colectivos pactados hasta el momento se han cerrado con un alza salarial del 2,56%. No afectan, ni por lo más remoto, a todos los trabajadores. Pero, incluso tomando ese dato como referencia, la subida en lo que va de año de la recaudación del IRPF se eleva en 13,24 puntos por encima de ese nivel. Es decir, que los españoles pagan, al menos y en plena crisis, un 13,2% más por el IRPF. Y aquellos que no hayan tenido ninguna actualización del sueldo, pagan directamente un 15,8% más por el principal impuesto que castiga los sueldos.
El IRPF recae de forma aplastantemente mayoritaria sobre las clases medias.
O, dicho de otra manera: la negativa del Gobierno a deflactar el IRPF para que el castigo fiscal no suba de forma automática con la inflación, está teniendo un efecto demoledor sobre el poder adquisitivo de la población.
Pero mientras tanto, el Gobierno de Pedro Sánchez se niega a bajar el IRPF. O, cuando menos, a dejar de subirlo de forma camuflada aprovechando la inflación.
Hay que recordar que las subidas de impuestos siguen a la orden del día en España. De acuerdo con los cálculos que ha realizado Libertad Digital, desde que Pedro Sánchez es presidente se han aplicado al menos 42 subidas tributarias que han elevado la recaudación tributaria desde los 193.951 millones recaudados en el último curso completo del gobierno de Mariano Rajoy (2017) en concepto estrictamente tributario, hasta los 223.385 millones recaudados durante el pasado ejercicio 2021.
Este 2022, de hecho, la tónica se mantiene y, además, se ha disparado, puesto que ese mismo documento de la Agencia Tributaria apunta a que los ingresos fiscales han aumentado un 18,2% a lo largo del primer semestre de 2022, impulsados por la acumulación de subidas impositivas y el efecto que está teniendo la inflación debido a la no deflactación de las tarifas de tributos como el IRPF.
Los aumentos impositivos aprobados a lo largo de la era sanchista afectan, hasta la fecha, al IRPF (8 subidas); Impuesto sobre Sociedades (4 subidas); Impuesto sobre el Patrimonio (1 subida); Impuesto sobre el Valor Añadido (1 subida); Impuesto de Sucesiones y Donaciones (1 subida); otros impuestos y tasas (10 subidas); y cotizaciones sociales (17 subidas).