España huele ya a elecciones. Todo está impregnado de ese tinte electoral, y yo creo que si hay algo importante en una democracia es ir a votar de forma formada e informada. El panorama político español es cada vez más convulso, pero los líderes más importantes llevan ya años en sus respectivos cargos y, afortunadamente, y gracias al sistema autonómico, hay modelos que podemos comparar y ver los distintos resultados.
Evidentemente, lo que ocurre en cualquier región afecta a todo el país, y especialmente si es algo relacionado con la comunidad que más aporta al PIB nacional como es el caso de Madrid. Pero esto no debe servir para justificar que no se pueden comparar modelos, puesto que esto implicaría que dichas comparaciones, incluso entre países, serían imposibles.
Así que, una vez hechas los primeros apuntes, vayamos a lo importante: La comparativa entre los datos que arroja Madrid bajo el mando de Ayuso y los que da España bajo la batuta de Sánchez reflejan una balanza inclinada claramente hacia la primera.
Veamos 3 de los más importantes:
Actividad económica
En esta columna hemos hablado desde hace años de los problemas que iba a tener España para recuperar los niveles de PIB previos a la crisis. La gestión de la pandemia fue la más deficiente de toda Europa, al igual que ha ocurrido con la recuperación en 2021 como en 2022 y 2023.
Tanto es así que España es el único país europeo que no ha recuperado los niveles de riqueza previos a la crisis. Algunos como Irlanda ya están más de un 20% de los niveles registrados en 2019; otros, como Alemania o Francia, han experimentado un crecimiento más débil y están un 2% o menos por encima de estos niveles.
Pero sólo España sigue por debajo, y tan sólo destaca en algunos de los indicadores económicos de dudosa reputación, como es el caso de la capacidad adquisitiva o la emisión de deuda pública.
¿Y la Comunidad de Madrid? La semana pasada conocimos que no sólo ha recuperado los niveles de riqueza previos a la crisis, sino que se sitúa en niveles muy similares a la media europea, y por encima de lo que ha registrado Alemania.
Mientras que España ve retroceder sus niveles de riqueza por habitante (PIB per cápita) a 2017, Madrid sigue situándose a la cabeza de Europa. Según hemos conocido esta misma semana (lean):
- El PIB en paridad de poder adquisitivo de la región es, en términos absolutos, el cuarto más alto de las regiones europeas y es superior al de trece de los 27 estados miembros de la Unión Europea.
- La Comunidad de Madrid, con 36.900 euros, se situó en el año 2021 en el Top100 de regiones de la UE27 con mayor PIB per cápita en paridad de poder adquisitivo.
- Su PIB per cápita PPA está un 14% por encima de la media europea y, en 2021 volvió a ser el más alto de todas las regiones españolas.
Inversión Extranjera
En las últimas 2 semanas hemos asistido a un movimiento interesante en el terreno empresarial español: Ayuso se ha ido a Londres y ha vuelto con la certificación de un nuevo proyecto de Microsoft para la Comunidad de Madrid y el Gobierno de Sánchez ha salido en tromba contra una empresa (e incluso contra personas concretas) que ha decidido libremente salir de España por la falta de seguridad jurídica y por el incremento en su factura fiscal.
¿Es este un caso aislado, o es algo que se veía venir? Pues los datos que venimos viendo desde hace años son ilustrativos:
Desafortunadamente, para 2022 solamente hay datos para los 9 primeros meses del año. Y los datos hablan por sí solos: Entre enero y septiembre de 2022 han venido inversiones a España por valor de 22.500 millones de euros. Entre el mismo período de 2018 (recordemos que Sánchez accedió al poder a mediados de ese año), nuestro país estaba recibiendo más de 40.700 millones de euros de inversión extranjera productiva (No ETVE).
El resultado de la gestión de Sánchez es evidente: Caída del 50% de la inversión extranjera directa. Y, si uno evalúa las cifras con un poco de detenimiento, es fácil deducir que no ha sido por el Covid19 ni nada por el estilo. La inversión extranjera en España se desplomó en 2019 y no se ha recuperado desde entonces.
¿Qué hay de la Comunidad de Madrid? Ayuso accedió a la presidencia en agosto de 2019. En los 9 primeros meses de ese año ya se notaba el efecto Sánchez en España, y también en la Comunidad de Madrid. La inversión extranjera fue de 10.400 millones de euros. ¿Qué ha ocurrido 3 años después? Qué casualidad (nótese la ironía), la inversión se ha incrementado hasta los 14.500 millones de euros.
O, dicho de otra manera: Desde que Ayuso es presidenta la inversión en la Comunidad de Madrid se ha incrementado un 40%.
Personalmente, no creo en las casualidades, y sí en el trabajo bien hecho. Cuando España ha aplicado las mismas políticas que ahora se están aplicando en la Comunidad de Madrid, el resultado fue evidente: Octava potencia más importante del mundo y motor económico y de creación de empleo europeo… incluso en un contexto de crisis como fue la burbuja puntocom.
Mercado laboral
¿Cómo sale la comparativa del mercado laboral entre ambos modelos? Desafortunadamente, la mala calidad que hay actualmente en buena parte de los datos estadísticos disponibles (la situación de los fijos discontinuos y la falta de una evolución histórica homogénea sobre este mismo colectivo) lastran la capacidad de análisis, pero lo poco que conocemos también es esclarecedor.
A pesar del empuje de Madrid y del notable impulso del sector público, el mercado laboral en España lleva estancado algunos meses. Veamos algunos datos:
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Según la EPA, más del 50% del empleo creado desde la pandemia ha sido en el sector público.
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Hay 4.600 autónomos menos que hace 1 año y en enero se cerraron 10.500 pequeños negocios en España.
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El número de parados permanece estancado. El paro registrado es de 2,9 millones de personas. Si añadimos DENOs (205.000 personas), demandantes de empleo con disponibilidad limitada (307.000 personas) y personas en ERTE (15.000) la cifra asciende a 3,4 millones de parados.
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Mientras tanto, Madrid crea 1 de cada 4 empleos en el último año según los datos de afiliación de la Seguridad Social, y lo hace con un nivel de contratación indefinida que es 8,8 puntos superior a la media nacional.
Todo lo anterior está ligado. Sólo la inversión privada (nacional e internacional) puede generar actividad económica productiva, y con ella PIB y empleo. Desde luego, defenestrando a los empresarios, tratándolos como animales a los que hay que desangrar para poder sacar adelante la agenda ideológica del gobierno ninguna economía de ningún lugar del mundo ha funcionado.
Personalmente, no creo que haya muchas empresas más que se deslocalicen como ha ocurrido por Ferrovial. No por miedo, sino porque una decisión así está basada en criterios empresariales de primer nivel que es muy difícil que se produzcan.
Pero que sigan cerrando pequeños negocios, que el crédito deje de fluir a la economía productiva, y que las inversiones de las grandes empresas nacionales se dirijan cada vez más hacia otros lugares no es que vaya a ocurrir. Es que va a seguir ocurriendo como hasta ahora.
Este año es trascendental para la evolución económica nacional de los próximos años. Tenemos que decidir si queremos ser Argentina o la España de los 2000 que maravillaba al mundo. Los resultados de los dos modelos están a la vista.