Las transmisiones de vivienda, sea vía herencia o mediante donación, están en retroceso. A lo largo del pasado ejercicio 2022, ambas formas de legar activos de generación en generación entraron en números rojos, un marcado contraste con la subida general de casi un 15% experimentada en el mercado general de compra-venta de inmuebles.
Si nos fijamos en el número de viviendas transferidas vía herencia, encontramos que el año 2022 se cerró con un total de 197.021, lo que supone un 2% menos que las 201.117 practicadas el curso anterior 2021. Pasó algo similar con las donaciones de casas y pisos, que cayeron de 25.304 en 2021 a 22.549 en 2022, una reducción del 11%.
Cabe recordar que el gobierno de Pedro Sánchez puso en marcha en 2022 un nuevo valor de referencia catastral que se utiliza para calcular la base imponible de tributos como el Impuesto de Sucesiones y Donaciones. El anuncio de estos cambios en verano de 2021 fue interpretado rápidamente por el sector inmobiliario como una rebaja fiscal encubierta.
Para ser precisos, los estudios que han publicado las principales empresas de tasación de bienes inmobiliarios apuntan que se ha producido un encarecimiento medio del 17% en los pagos fiscales exigidos por la transmisión de inmuebles. Estos cambios normativos no solo abarcan el citado Impuesto de Sucesiones y Donaciones, sino que también afectan a otros gravámenes tan importantes como el IBI, el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados, el Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, etc.
Semejante aumento tributario tuvo un efecto directo en los datos de la segunda mitad de 2021, que describieron una aceleración del 30% en el ritmo de donaciones cerradas durante el segundo semestre del ejercicio. En cambio, desde 2022, los datos ya van en retroceso, con la citada caída del 2% en las herencias y del 11% en las donaciones, a raíz de la entrada en vigor de la nueva referencia de los valores catastrales y de la consecuente alza tributaria por la puerta de atrás.
Por comunidades autónomas, encabeza la lista de operaciones Andalucía, que no solo es la comunidad más poblada, sino que también goza de un clima fiscal más benigno en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones merced a las rebajas que aprobó primero el gobierno de coalición PSOE-Cs que presidía Susana Díaz y profundizó después el gabinete PP-Cs que lideraba Juanma Moreno. Ya en solitario, el líder popular anuncia nuevas ventajas pero, de momento, los datos ya sitúan al territorio sureño en cabeza, con 4.585 donaciones y 34.707 herencias.