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Ecuador deja en evidencia los impagos de Sánchez y "limpia" sus deudas internacionales

Mientras España sufre cada vez más embargos, Argentina y Ecuador llegan a acuerdos para zanjar sus deudas y cumplir las condenas.

Mientras España sufre cada vez más embargos, Argentina y Ecuador llegan a acuerdos para zanjar sus deudas y cumplir las condenas.
Daniel Noboa llega a un acuerdo para | Cordon Press

El gobierno de Ecuador que preside Daniel Noboa anunció recientemente que ha llegado a un acuerdo con sus acreedores internacionales que permitirá "limpiar" las deudas adquiridas el país andino tras perder diversos procedimientos de arbitraje internacional ligados a una disputa en el ámbito de la energía.

Esta situación deja en evidencia al gobierno español que dirige Pedro Sánchez, que sigue sin pagar las veinticinco sentencias que condenan a nuestro país por la retirada retroactiva de las primas renovables. Como explicó Libre Mercado, esta circunstancia ha hecho que España se sitúe a la par de Venezuela y por delante de Rusia en cuanto al número de laudos pendientes de pago.

De esta forma, Noboa exhibe una postura similar a la de Javier Milei, quien ha anunciado un plan de pago orientado a devolver los 16.000 millones de dólares que debe pagar Argentina en concepto de indemnización por la nacionalización de YPF. El país del Cono Sur presentará próximamente un plan de privatización de la petrolera que generará recursos para pagar la multa. Asimismo, Milei ha comunicado que creará un bono o tasa diseñado específicamente para materializar los pagos pendientes.

En Ecuador, el caso con el que está lidiando Noboa involucra a una compañía estatal china, Sinopec Oilfield Service Corporation, así como a un conglomerado público del país andino, Petroecuador. El conflicto se remonta a los años de gobierno del bolivariano Rafael Correa y gira en torno a una serie de disputas por los pagos relacionados con tres yacimientos de petróleo adjudicados en 2016.

Dicho episodio llevó a un arbitraje internacional que concluyó en 2022 y condenó a Ecuador al pago de una multa que, al considerar también la condena en costas y el impacto de los intereses de demora, asciende a 64 millones de dólares. Ante esta situación, el gobierno ecuatoriano ha formalizado un primer plan de pago que "limpiará" 35 de los 64 millones pendientes de pago a través de once transferencias mensuales previstas para el presente año 2024.

Además, el gobierno de Noboa ha acordado con Sinopec el establecimiento de distintas comisiones y grupos de trabajo que buscarán posibles planes de pago, con el objetivo último de encontrar un acuerdo satisfactorio para ambas partes y "limpiar" el 50% de la deuda que quedará pendiente a cierre del presente año 2024, cuando se haya completado la primera parte del plan de pago.

La cerrazón de Sánchez desencadena los embargos

Este enfoque de Ecuador, liderado por Noboa, refleja la disposición del gobierno andino de resolver el problema y honrar las obligaciones financieras adquiridas por el país. Llama la atención, pues, el contraste de este comportamiento con la estrategia de impagos que ha venido siguiendo la Administración Sánchez en España.

Este enfoque, marcado por el impago de decenas de condenas, ha generado un problema de inseguridad jurídica y ha contribuido a propagar la desconfianza entre los inversores extranjeros, alimentando asimismo el embargo cautelar de distintos bienes, propiedades, derechos financieros y cuentas bancarias de nuestro país, en línea con las medidas compensatorias que han reclamado los afectados y que han sido autorizadas por la justicia británica.

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