El Impuesto de Sucesiones y Donaciones genera un rechazo mayoritario entre los españoles, hasta el punto de que tres de cada cuatro ciudadanos aboga por suprimirlo. Algo parecido ocurre con el Impuesto de Patrimonio, que genera un rechazo cada vez más pronunciado, con tres veces más partidarios de su abolición que de mantener su aplicación, lo que supone un vuelco histórico y deja al Ejecutivo de Pedro Sánchez cada vez más solo.
Así se desprende de un barómetro elaborado por el Instituto DYM para el gratuito 20 Minutos. Según la encuesta, el porcentaje general de rechazo a la tributación de las herencias es del 75,4%. Entre quienes votaron al PSOE en las últimas elecciones generales, este porcentaje es del 74,8%, mientras que el 61,4% de los ciudadanos que eligieron la papeleta de Unidas Podemos se manifiestan en la misma línea.
El rechazo es incluso mayor entre aquellas personas que eligieron a los partidos del centro-derecha en la última cita con las urnas. Así, el 89,1% de los votantes de Vox aboga por suprimir el Impuesto de Sucesiones, un porcentaje similar al 85,9% que se observa entre quienes respaldaron al Partido Popular o el 85% registrado entre quienes apoyaron a Ciudadanos.
De acuerdo con el sondeo, el 62,7% de los españoles son partidarios de suprimir el Impuesto sobre el Patrimonio. De hecho, solo un 22,6% de los ciudadanos se pronuncian en contra de la eliminación de dicho gravamen, lo que evidencia su creciente impopularidad. Entre los votantes del PSOE y de Podemos hay un 58,3% y 51,9% de voces a favor de acabar con este tributo, frente a un 29,1% y un 36,4% que apuesta por su mantenimiento.
También entre los votantes del centro-derecha hay una apuesta firme por eliminar el Impuesto sobre el Patrimonio. Tomando como referencia los sufragios emitidos en las últimas elecciones generales, encontramos que el 85,4% de quienes apoyaron a Vox, el 78,6% de quienes eligieron la papeleta del Partido Popular y el 74,8% de los votantes que confiaron en Ciudadanos se pronuncian a favor de acabar con este impuesto, que no existe desde hace años en Madrid y ha sido eliminado en la inmensa mayoría de los países de la OCDE.
La encuesta del Instituto DYM también apunta el creciente hartazgo de los ciudadanos con las continuas subidas de impuestos del gobierno de Pedro Sánchez. En suma, el 66,2% de los españoles califican como "muy alta" o "alta" la cantidad de dinero que pagan anualmente al fisco. Apenas un 26,7% ve adecuada su aportación tributaria. El porcentaje que lamenta sus elevadas contribuciones a Hacienda es mayoritario entre los votantes de PSOE (53,8%) y Podemos (53,7%), los dos partidos de gobierno que son directamente responsables de los 54 aumentos impositivos de la Era Sánchez.
El rechazo entre quienes votaron por las opciones del centro-derecha en los últimos comicios generales es incluso mayor. Así, el 80,7% de quienes votaron al PP, el 79,1% de quienes eligieron a Ciudadanos y el 78,8% de quienes optaron por Vox consideran que pagan una cantidad de dinero "muy alta" o "alta" en concepto de impuestos.
Este mismo año, un barómetro elaborado por GAD3 para ABC ha encontrado que el 70% de los votantes del PSOE y el 60% de quienes apoyan a Podemos consideran que es hora de bajar los impuestos, en línea con el sentir general que expresa el 74% de los españoles. De hecho, solo un 14% se muestra claramente en contra de una rebaja impositiva. Por tanto, por cada ciudadano que se opone a bajar impuestos hay cinco que están a favor.