El sector nuclear español representado por la Sociedad Nuclear Española presentó la semana pasada un Manifiesto en defensa de las centrales nucleares como fuentes de energía estratégica en España en el que defendían que nuestro país "no puede prescindir" de este tipo de energía y pedían al Gobierno "la continuidad del parque nuclear español".
La petición, dirigida formalmente al Ejecutivo que preside Pedro Sánchez, tuvo una rápida respuesta: el pasado viernes, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, descartó cambios en el calendario, que establece el primer cierre en 2027 y el último en 2035. En la línea del resto de miembros del Gobierno cuando son preguntados sobre ello, Rodríguez se escudó en que el plan se acordó con las empresas, sin mencionar las repetidas quejas del sector por la presión fiscal que soportan y la incertidumbre en torno a unas instalaciones que necesitan una planificación de varios años de antelación para continuar en marcha.
En declaraciones a la emisora Canal Extremadura Radio, Rodríguez defendió que el acuerdo para cerrar las plantas está "firmado y sellado y los plazos permanecen vigentes". "Habrá quien defienda las energías nucleares, no es el caso de este Gobierno, que apuesta por las energías verdes", señaló obviando que la UE ya la considera verde y desde la comunidad autónoma donde está previsto el primer cierre, el de Almaraz 1 en 2027, donde el PSOE mantiene una postura radicalmente contraria.
Entre tanto, los autores del manifiesto están intentando movilizar a los ciudadanos contra el plan de cierre en un año que será decisivo para el futuro de las centrales. El divulgador Alfredo García (@OperadorNuclear) ha lanzado una campaña "para evitar el cierre de las centrales nucleares españolas" en la que invita a sumarse al manifiesto, a través de una recogida de firmas en el portal Change.org. En unas horas, la campaña ha sumado más de 6.000 adhesiones.
García defiende que las centrales son "necesarias para garantizar un suministro eléctrico bajo en emisiones, fiable, asequible, seguro y sostenible" en "colaboración con las energías renovables en la transición energética" y aporta las diez razones del manifiesto para entender "por qué necesitamos salvar las nucleares". Entre ellas, que la demanda de electricidad se va a duplicar en 2050, que las nucleares españolas "funcionan de manera segura, fiable y eficiente", que generó el año pasado más de un 20% de la energía consumida en España y que la industria nuclear española genera más de 20.000 puestos de trabajo.